----- EL ABISMO -----

Hay cosas que me causan risa, una de ellas es la matotiza que se estan dando los hombres y mujeres, perredistos y perredistas, en lo que es algo tan simple como su Presidente del Partido. Se sacan a flote los ¿como les dire? sus odios internos que tan bien disimularon en la eleccion del 2006.

Y para aclarar el punto, me ataque de risa, cuando veo a Creel, con cara desencajada. Bueno esta que le pase.

Ahora, hijole, se los juro que nunca crei que llegaran hasta ese grado, me tienen anonadada con sus pleitos internos. Ah, pero eso si,se unen como uno, para cuando se trata de defender candidatos,hay que reconocerlo.

Traigo aqui una coleccion de Notas y Articulos periodisticos, y no crean que es porque quiero que sea el Foro del cual tengo el honor de formar parte, sea el primero, no, no me anima eso, me anima que conoceremos todos los puntos de vista, respecto al tema.

Prevén división en PRD si contienda se decide en el TEPJF
Notimex
El Universal
Ciudad de México
Sábado 12 de abril de 2008


Espera el presidente del VI Consejo Nacional del PRD, Camilo Valenzuela Fierro, que una vez terminado el computo de la elección realizada el pasado 16 de marzo concluya el capítulo que está “costando muy caro al partido”


El presidente del VI Consejo Nacional del PRD, Camilo Valenzuela Fierro, aseveró que si el proceso interno de ese partido se decide en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) es casi segura la división del perredismo.

En entrevista, confió por ello en que la Comisión Técnica Electoral (CTE) que encabeza Arturo Núñez Jiménez concluya el cómputo de la elección, como le ordenó la Comisión Nacional de Garantías y Vigilancia (CNGV) del sol azteca.


Valenzuela Fierro dijo que espera que una vez terminado el conteo de la elección del 16 de marzo pasado "el resolutivo de la Comisión Nacional de Garantías sea el capítulo final de esta historia que está costando muy caro al PRD".


En la sede de la Expo Reforma, donde se espera la reanudación de la reunión perredista, el también ex candidato a la dirigencia nacional estimó que la próxima semana "pudiera determinarse el último capítulo de esta dolorosa situación postelectoral".


A pregunta expresa de si hay condiciones para concluir el conteo de la votación en 48 horas, consideró que "no las hay. La Comisión Técnica decidió terminar el conteo el lunes pasado y mantiene esa posición, en tanto que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) tiene tiempo desaparecido y no creo que aparezca para hacer suplencias".


Señaló que espera que la contienda no termine en manos del TEPJF porque "si se va por la vía de la judicialización ello nos llevaría, casi seguro, a la división del partido".


Por otra parte justificó la decisión de legisladores de su partido de mantener tomadas las tribunas de las cámaras de Diputados y Senadores para evitar la discusión de la reforma energética en el Congreso de la Unión pues, dijo, son autónomos.

Propone Acosta que se nombre dirigencia interina del PRD
Redacción EL UNIVERSAL.com.mx
El Universal
Ciudad de México
Sábado 12 de abril de 2008


El secretario general del partido dijo que repetir la elección sería como Terminator 2, ¿qué necesidad tenemos de eso?, se cuestionó


Guadalupe Acosta Naranjo, secretario general del Partido de la Revolución Democrática (PRD), propuso que se nombre un presidente interino hasta que se termine con el computo de los votos del proceso electoral de ese partido político.
“Yo sugeriría un interino breve en tanto se resuelven los cómputos finales, que sería cuestión de 15 o 20 días”, dijo Acosta Naranjo.

El resultado del proceso interno dependerá de que el comité técnico electoral, encabezado por Arturo Núñez, acate la resolución de la comisión nacional de garantías para que n un plazo de 48 horas se culmine ya con el cómputo de los sufragios, porque también existe la posibilidad que se busque una prorroga de la actual dirigencia nacional.

“Yo no quisiera volver a vivir una nueva elección. Eso sería como Terminator 2, ¿qué necesidad tenemos de eso? Estamos teniendo enormes dificultades como cocerlo a uno a fuego lento”, asevero el secretario.

Oficialmente el 22 de abril tendría que tomar el nuevo dirigente , pero hasta el momento ni hay conteo concluido ni, por supuesto, un ganador.

Rehúsa Comisión Técnica del PRD continuar cómputos
Jorge Ramos Pérez
El Universal
Ciudad de México
Sábado 12 de abril de 2008


Pide a la Comisión Nacional de Garantías del partido, para poder reanudar el cómputo, más explicaciones sobre las actas de casillas computadas hasta el 7 de abril


La Comisión Técnica Electoral (CTE) del PRD se rehusó a concluir el cómputo de presidente nacional de ese partido y demandó a la Comisión Nacional de Garantías (CNG) diversas explicaciones, entre ellas los supuestos para poder abrir paquetes electorales.

Ayer, la CNG ordenó a la CTE concluir el cómputo, bajo riesgo de ser removidos sus integrantes –el senador Arturo Núñez y Edmundo Cancino- de ser removidos.


“En todo caso, y como paso previo a la posible reanudación de las actividades sobre el cómputo, resulta indispensable que esa Comisión aclare, en uso de sus facultades reglamentarias, la correcta interpretación de la naturaleza y alcances del artículo 98 del Reglamento”, estableció esta tarde la CTE.


Además, pide a Garantías que interprete “los tres supuestos que dispone para la eventual apertura de paquetes electorales y recuento de votos, a saber: que los resultados de las actas no coincidan; que las mismas contengan errores de cómputo evidente; o bien que los paquetes electorales presenten muestras de alteración”.


Asimismo, le exige, para poder reanudar el cómputo, “establecer, sin lugar a dudas, la pertinencia de la aplicación de tales supuestos normativos, con relación a las actas de casillas ya computadas hasta el 7 de abril, en que se determinó la imposibilidad de concluir con las actividades respectivas”.

López Obrador acabó con el PRD
Jorge Fernández Menéndez
Es difícil entender cómo un político con la experiencia de Arturo Núñez no pudo descubrir a tiempo la trampa en la que se metía al aceptar coordinar el proceso electoral del PRD. En realidad, entre todas las posibilidades, hay una razón de fondo para ello: Núñez no conoce al PRD. Mejor dicho: conoce la superficie, pero no la trama de un partido que puede tener muchos puntos de contacto con el viejo priismo, pero que viene de otra historia y de mecanismos de confrontación interna que no tienen, vaya paradoja, el elemento de disciplina que, en última instancia, y a pesar de todos los pesares, es casi un gen presente en muchos priistas. Algo similar ocurre con Leonel Cota Montaño: el presidente saliente del PRD llegó a ese cargo sin haber militado ni un día de su vida en el PRD. De colaborador de Humberto Roque Villanueva en el PRI pasó, sin escalas, al perredismo, como candidato a gobernador de Baja California Sur (un estado donde el control, más que partidario, ha resultado ser familiar) y de allí a la dirigencia del PRD. No conoce, aun hoy, al partido en profundidad y ha sido superado por todos los eventos internos que se han dado en estos tres años. Como Núñez, fue superado por la dinámica de las corrientes en esta elección. Hay un dato adicional: a ambos los colocó en esa posición López Obrador, quien sabía perfectamente que Arturo no podría con la confrontación interna y que Cota Montaño sería un personaje manejable por su principal y único elector, como ha sucedido.

López Obrador no quiere molestias en el liderazgo de su movimiento. Por eso ha alejado sistemáticamente a cualquiera que pudiera, no sólo competir, sino siquiera opinar en contra. Así, traicionó a Cuauhtémoc Cárdenas y a Rosario Robles y se terminó apoyando en personajes de baja estofa, como los Bejarano o los Fernández Noroña; así, su oradora de cabecera es Rosario Ibarra de Piedra, que nunca estuvo cerca del PRD. Sus operadores resultaron ser Manuel Camacho y Porfirio Muñoz Ledo, dos hombres con trayectoria controvertida pero propia, que sin embargo dependen políticamente por entero del apoyo que les pueda brindar López Obrador. Encinas es hoy su candidato a presidir el partido porque arrojó por la borda su prestigio político cuando decidió, en la Jefatura de Gobierno, actuar como un disciplinado seguidor de su jefe en vez de respaldar los derechos de la ciudadanía en la capital. Jesús Ortega y Nueva Izquierda, así como las corrientes de esa ideología que se nuclearon en torno a Alfonso Ramírez Cuéllar o Camilo Valenzuela, tienen voces y pesos propios en la política nacional, por ende, no sirven a sus designios.

Los gobernadores e incluido, pese a lo que él cree, Marcelo Ebrard, tampoco cuentan: se disciplinan o no existen para el caudillo. ¿Por qué fracasó tan estruendosamente esta elección del PRD? Primero, porque era claro que López Obrador (si no se daba un triunfo arrollador de su candidato, Encinas) no aceptaría de ninguna forma que el partido estuviera liderado por Ortega. Por eso la reventó desde el inicio. Siempre las elecciones internas del PRD han sido conflictivas. Pero nunca se presentó una situación como la actual. La principal diferencia y lo que permitió que de todos esos procesos el PRD saliera lastimado, pero no roto, fue que el liderazgo real del partido recaía en Cuauhtémoc Cárdenas y éste nunca se volcó, abierta y públicamente, en favor de uno de los candidatos. Por supuesto, tuvo preferencias, pero Cuauhtémoc nunca apoyó, en público, a un candidato. Eso dio siempre posibilidades de negociación e intermediación.

Ahora no fue así: al apoyar López Obrador públicamente (y además de manera ilegal, porque sólo el financiamiento de las famosas cartas de AMLO violaba de tal forma la norma interna que, si cualquiera de los otros candidatos hubiera exigido al TEPJF la anulación de la candidatura de Encinas, lo hubiera logrado sin contratiempos) a uno de los candidatos, rompió no sólo los equilibrios sino también la posibilidad de intermediación. López Obrador hoy no es, no quiere tampoco serlo y no sería aceptado, interlocutor de los distintos sectores involucrados en la lucha interna. Y el poder transferido a Núñez o a Cota Montaño simplemente se esfumó, porque ninguno de los dos tiene peso e historia en el PRD sin AMLO.

Eso es en el plano político. En el legal hay varios problemas que debe asumir el perredismo. Si no concluye el conteo, incluidas todas las casillas, el proceso estaría a un tris de la anulación, si no es por la comisión de vigilancia del PRD, por el Tribunal Electoral. Encinas se ha cansado de decir que eso no le importa porque no acepta la legitimidad del TEPJF, pero sí acepta, gustoso, las prerrogativas económicas y de todo tipo que le da el ser uno de los partidos políticos reconocidos por el sistema. A la larga, si no acepta las resoluciones del Tribunal o del IFE tendrá que ser sancionado. Esa es precisamente la estrategia de López para revitalizarse: repetir la lógica del desafuero. No importa si se violó o no la ley en la elección: lo que se dirá es que, con las sanciones al PRD, lo que se quiere evitar es que compita López Obrador. Pero esa es una estrategia que sólo sirve para él y sus incondicionales. Todos los políticos con peso propio en el PRD, con intereses e influencia real, quieren participar del conjunto del proceso político, incluido por supuesto el legislativo. Y por eso no habrá acuerdo en el PRD.

Con un punto adicional. Si la elección se anula, se deberá anular el conjunto de los comicios, o sea, no sólo la de la dirigencia nacional, sino también de las estatales. Habría un PRD absolutamente descabezado y con mandos interinos en casi todos los niveles. Imagine usted a quién le conviene esa situación, para que nadie interfiera en su liderazgo legítimo.

PRD: pierde Calderón; AMLO, a 2012
Martín Moreno
Más allá del lodazal en el que transcurrió la elección interna del PRD, con atracos electorales muy a la manera del PRI y una insensata y maniquea postura del próximo presidente amarillo, Alejandro Encinas, quien de repente se volvió ciego y sordo ante la cascada de irregularidades que todos vieron, el triunfo del lopezobradorismo nos abre algunos escenarios. 1) Fracasó la apuesta de Los Pinos por una victoria de Jesús Ortega. La nueva dirigencia del PRD le provocará al presidente Felipe Calderón un arrinconamiento político permanente. 2) Suponer que Andrés Manuel López Obrador no pretende estar en las boletas electorales de 2012 como candidato presidencial es tanto como creer que mañana reconocerá a Calderón como Presidente de México. El triunfo de Encinas le da, por el momento, en automático, la candidatura presidencial a AMLO.


Calderón. El peor escenario que calculaba el gobierno panista era que Encinas y, consecuentemente, AMLO, ganaran la elección. Y así ocurrió. Saben Calderón y su cada vez más empequeñecido “grupo compacto”, que el rencor político y personal del lopezobradorismo es muy superior a la necesidad de entablar un diálogo que permita avanzar en los acuerdos y las reformas que necesita el país.

Para el gobierno calderonista era fundamental que Ortega fuese el nuevo presidente del PRD porque ello, si bien no garantizaba ciento por ciento la posibilidad de contar con su apoyo absoluto, sí representaba una posibilidad real de diálogo que abriría las puertas a acuerdos tanto a nivel Congreso como con la nomenclatura amarilla.

Pero, con la victoria de Encinas, esa posibilidad se canceló.

¿O acaso cree Calderón que Encinas, aliado incondicional de AMLO, compañero de fórmula política y amigo personal, aceptará platicar siquiera con el vapuleado Juan Camilo Mouriño? Son las consecuencias de que tengamos un secretario de Gobernación sin la autoridad moral ni ética suficientes para imponer respeto y credibilidad entre las fuerzas políticas.

Con Encinas y AMLO al frente del PRD, los canales de negociación con el gobierno se cerrarán irremediablemente y entonces es aquí donde entra en juego otro factor: las corrientes contrarias a AMLO que operan en las cámaras de Diputados y de Senadores y en la Asamblea Legislativa del DF.

Ya se habla de que AMLO va por la cabeza de quien le llamó “misógino” y es su enemigo declarado: Víctor Hugo Círigo, a quien pretenden arrebatarle el control de la ALDF, a través de las tribus al servicio de René Bejarano, cuya operación política fue la que realmente le dio el triunfo a Encinas al arrasar en la capital del país.

Y, en San Lázaro, AMLO, Encinas y compañía intentarán tener el dominio absoluto para lograr, ahora sí, su propósito de “cero negociación” con el gobierno espurio, a base de operadores propios que respondan a su intención de debilitar a Calderón y a su administración. Por eso ni Carlos Navarrete en el Senado —apoyo permanente de Los Chuchos— ni Javier González Garza con los diputados tienen segura su permanencia al frente de las coordinaciones legislativas del PRD.

La pregunta es: ¿se doblegarán ante la supremacía de AMLO y Encinas dentro del PRD o habrá una guerra interna para no permitir que el lopezobradorismo apabulle a sus rivales de partido?


2012. En privado, AMLO ha reconocido que quiere ser, nuevamente, candidato a la Presidencia de México. Tiene todo el derecho, le guste o no a aquellos que lo ven como un problema para el país y que quisieran, inclusive, eliminarlo o desterrarlo.

AMLO tiene la mira puesta en 2012 y, con Encinas al frente del PRD, prácticamente nada le impediría volver a presentarse como candidato presidencial. Hoy por hoy no tiene un plan B ni con Encinas ni con Ebrard. Él es su propio plan B o C y está dispuesto a llegar a Los Pinos, a menos que en el camino le ocurra una desgracia política.

“¿Quién creía que íbamos a ganar? ¡Nadie! ¿Qué pasó? ¡Llegó la revolución blanca!”, clamaba Encinas, de acuerdo con la crónica de Roberto Zamarripa en Reforma. Pero el futuro presidente del PRD le debe el triunfo, no a la “revolución blanca”, sino a Bejarano y compañía, quienes echaron a andar todo su poderío político-electoral para que una elección que prácticamente iba empatada se despegara en su favor, gracias al bejaranismo en el DF. Un ex presidiario por corrupción hizo ganar a Encinas, con toda la vergüenza que ello conlleva.

Encinas venció también gracias a una elección desaseada, violenta y manipulada. En 16 estados hubo serias irregularidades, entre ellas, robo de urnas. Al clásico estilo priista hubo también “operación carrusel”, “ratón loco” y boletas llenadas con anticipación. A diputados locales los golpearon. Hubo simpatizantes amenazados con pistola. Batallas campales. Pequeños fraudes tanto de operadores de Ortega como de Encinas. El lodazal amarillo en todo su esplendor.

“No encontré elementos suficientes como para denunciar irregularidades en el proceso”, dijo Encinas. Vaya cinismo.

El PRD ya es de AMLO. Agárrense.

Archivo confidencial...Hugo Sánchez debe dejar a la Selección Mexicana de Futbol. Su soberbia es parte del fracaso. Tiene hartos a sus jugadores al obligarlos a ver todo el día sus videos personales, en un ejercicio incompleto que refleja su falta de preparación como entrenador. Y, del otro lado, ahí están las consecuencias de tener a juniors recomendados en la Selección preolímpica, como los bultos Esqueda y Santiago Fernández. Hay mil mejores en los llanos. Los dueños de los clubes también deberían considerar una limpia de directivos, empezando por el timorato Justino Compeán y el nefasto Decio de María. El país merece otro futbol.

La desgracia de la izquierda
Martín Moreno
Sin importar que se ratifique el triunfo de Alejandro Encinas o que Jesús Ortega dé la voltereta y sea erigido como nuevo presidente del PRD, la hoy desprestigiada izquierda mexicana ha entrado en un punto de quiebre, marcada por la intolerancia y reducida a una lamentable expresión política que sobrevive entre sus propias trampas electorales y los rencores entre caudillos y tribus.

La política, como la vida, da lecciones. Aquella corriente desertora del PRI, encabezada por Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo, que aglutinó, fortaleció e institucionalizó a diversas izquierdas extraviadas y dio paso para formalizar al PRD y fue víctima del fraude electoral más ofensivo y monumental, que ungió a Carlos Salinas de Gortari como Presidente de México, hoy, paradójicamente, se maneja como ese priismo de los ochenta: a base de engaños, sobornos y manipulaciones electorales.

La izquierda, con toda su pléyade de ex priistas que, ante los hechos, mantienen sus viejas prácticas electorales fraudulentas sin el menor pudor —los Camacho Solís, Monreal, Núñez, Ebrard—, ha permitido que se contamine y envenene la sangre democrática que, indudablemente, todavía corre por el cuerpo de algunos izquierdistas verdaderos.

Aún más: la honestidad democrática que mostraban los viejos luchadores de la izquierda mexicana —Encinas, Ortega, Círigo, Amalia García y más— se vio envuelta, derrotada y sometida ante los vicios políticos de quienes salieron del PRI cuando el partidazo ya no los llenó y se apoderaron del PRD para convertirlo en un partido que anida y representa al priismo más nocivo y arcaico de la historia.

Allí está Manuel Camacho, quien como secretario general del PRI fue, en 1988, el operador del fraude electoral que permitió a Salinas ser Presidente. Hoy es uno de los hombres fuertes del PRD por conducto de AMLO.

Marcelo Ebrard, el falso izquierdista, quien ha convertido al Gobierno de la Ciudad de México en un aparato al servicio de AMLO y de Encinas, como se observó en la elección del domingo pasado y quien, siempre a las órdenes de Camacho, participó también en el fraude del 88.

Otro más de la lista negra de la imposición salinista: Arturo Núñez, quien, además de ser un buen imitador de Verdaguer, es un magnífico alquimista electoral, experto en trampas y manipulaciones y que hoy, para mal fario de la izquierda, es nada menos que el presidente del ¡Comité Técnico Electoral! del PRD. ¿Cómo permitieron los izquierdistas que Núñez manejara la elección?

Por eso ahí están las consecuencias: un proceso electoral ensuciado, groseramente manipulado, con votos comprados, robo de urnas y, lo más grave: el sistema de conteo electoral fue silenciado la noche del martes pasado, faltando 12 minutos para las nueve, cuando había un empate entre Encinas y Ortega: 42.62% para el primero y 42.33 para el segundo. Con estilo gangsteril, los capturistas fueron expulsados de manera violenta. Como en los años dorados del priato.

Es decir: se les cayó el sistema.

Igual que en 88, cuando se consolidó el fraude salinista, operado por Camacho y compañía.

Ahora la izquierda está pagando el costo de haber permitido que los ex priistas se incrustaran, manejaran y dominaran los órganos electorales del PRD.

¿Con qué cara, a partir de hoy, van a levantar la voz los perredistas para denunciar algún fraude electoral en su contra, cuando es su método con miras a que sus líderes ganen la presidencia nacional del PRD?

Pero no se crea que solamente los priistas saben manipular elecciones. También hay perredistas y ex perredistas expertos en hacer trampas. Ahí están los testimonios de quienes ofrecían 100 pesos por voto y que pertenecían tanto a Nueva Izquierda (Ortega) como a Izquierda Unida (Encinas), operada por el ex presidiario René Bejarano —a quien Encinas le deberá siempre su triunfo— y por la esposa de éste, Dolores Padierna.

Al menos algunos lo reconocen. “Los enemigos de la elección fueron la violencia y las trampas”, dijo Graco Ramírez, operador de Los Chuchos y quien, de paso, cometió un error garrafal, al reconocer, la misma noche del domingo pasado, que la elección interna del PRD había sido legal.

Y ahora Núñez asegura que los resultados oficiales de la contienda interna perredista se darán hasta el próximo domingo “porque la tenemos que hacer legalmente”. Vaya cinismo. Hablar de legalidad cuando la elección fue un lodazal.

Y aun cuando no se ha oficializado el triunfo de Encinas —como lo expusimos en nuestros Archivos del martes pasado—, ya se afilaron los cuchillos para ajusticiar a quienes no pertenecen al lopezobradorismo, sin importar en lo más mínimo la cohesión interna del partido.

¿Para qué la democracia, si es más segura la trampa?

¿Para qué la unidad y la generosidad política, si el rencor es más sabroso?

El PRD y su amarillo tricolor.

PRD: lo que viene
Martín Moreno
Ensuciado por el lodazal electoral; despedazado en su credibilidad política; envenenado dentro de una guerra entre caudillos y tribus, y demostrando que la democracia es letra muerta en su vida interna, el PRD vislumbra ya cuatro escenarios para intentar salir, al precio que sea, de la profunda crisis que lo tiene hundido.

Primero: anular la elección. Segundo: anular parcialmente la elección. Tercero: que Alejandro Encinas, apoyado por AMLO y seguidores, anuncie su salida del PRD para consolidar al Frente Amplio Progresista (FAP) o bien aliarse al PT y Convergencia; o que Jesús Ortega siga el mismo camino para fundar un nuevo partido de izquierda. Y, cuarto: que no se anule la elección y se llegue a un acuerdo para que el perdedor acepte su derrota, a sabiendas de que el ganador será, en automático y paradójicamente, un presidente “espurio”.

Anulación. Esta vía era la más conveniente para tratar de aplicar un borrón y cuenta nueva al desastre electoral del PRD. Sin embargo, que Cuauhtémoc Cárdenas la hubiera propuesto la echó a perder. Que el ingeniero haya sugerido esa posibilidad la descartó casi por completo, ya que el bando de Encinas consideraría que Cárdenas le está marcando la línea al PRD o bien que fue necesaria su intervención para que se arreglaran las cosas. Y eso es algo que el lopezobradorismo no está dispuesto a permitir.

Aún más: la propuesta de Cuauhtémoc fue desechada también por Ortega. Así que esta opción —que para muchos perredistas continúa siendo lo más sano en este momento— quedaría casi descartada, aunque no se ha difuminado del todo.

Anulación parcial. “Solamente hay irregularidades en 10% de la elección”, dice el tramposo de oficio y ex priista Arturo Núñez. ¡Ah! Menos mal. Entendamos entonces que el PRD sólo es un poquito corrupto. Nada más. Y sería ese porcentaje el que se anularía.

Para el PRD ha sido una desgracia que Núñez, uno de los participantes en el fraude electoral de 1988 —operado por el entonces salinista secretario general del PRI, Manuel Camacho, a cuya derecha estaba Marcelo Ebrard—, haya ocupado la presidencia de la Comisión Técnica Electoral (CTE). Y que no venga ahora Ortega a quejarse de la parcialidad del árbitro electoral interno, cuando él mismo lo avaló en su momento. Su rechazo era desde el principio y no ahora, cuando el daño está hecho.

“Somos rehenes de ambos grupos”, se queja Núñez, a quienes los seguidores de Ortega ya rebautizaron como “Arturo Ugalde”. “Esto ya no es cosa de votos, sino de intereses”, dice el imitador de Verdaguer, quien se pregunta, como muchos otros, ¿por qué el presidente del PRD, Leonel Cota Montaño, ex priista también, se ha escondido debajo del escritorio?

Si bien la CTE carece de facultades para sancionar a los candidatos, Núñez ha sido rebasado debido a la polarización que él mismo ayudó a crear al reconocer, como resultados oficiales, las encuestas de salida de dos empresas. Ahí comenzó a crecerle el conflicto poselectoral y, ahora, ya desconocido tanto por encinistas como por orteguistas, saca la mano del fango para intentar ser rescatado.

La posibilidad de anular parcialmente la elección abarcaría los estados más conflictivos. Encinas va, por ejemplo, sobre Chiapas, Oaxaca y el Estado de México, donde al parecer hubo “mano negra” para favorecer a Ortega, mediante casillas zapato. ¿O cómo explicarse que en la tierra de los Sabines se presentara un votante por minuto en favor de Ortega? Es de risa.

Por su lado, Los Chuchos van sobre el Distrito Federal, Zacatecas y Tabasco. En la capital del país es sabido que Ebrard, Batres y compañía operaron con recursos públicos y con votos fantasma en favor de Encinas; en el segundo estado, de manera vergonzosa, la gobernadora Amalia García permitió que se maniobrara políticamente, el día de la elección, para favorecer al ex jefe de Gobierno, mientras que en la tierra de AMLO hay acusaciones de que se rellenaron urnas.

Al momento de escribir estos Archivos, el PREP del PRD seguía estancado. Durango, sin porcentajes de votación. Guerrero, que representa 5% del padrón perredista, apenas con 4% contabilizado. Michoacán, con 26 por ciento. Es una vergüenza.

Encinas. Si finalmente las cosas favorecen a Ortega, no dudemos de la salida del PRD tanto de Encinas como de AMLO y compañía. Tanto Alejandro como el presidente legítimo saben perfectamente que una derrota en esta elección les cerraría los espacios de tal manera que sería imposible pensar tanto en 2009 como en 2012.

Ortega. “No voy a negociar”, dice Jesús, a quien de paso vale la pena preguntar: ¿por qué sí aceptó, en anteriores fracasos para alcanzar la presidencia del PRD, negociar con el ganador? ¿Será por que entonces sí se sabía perdedor y ahora ve posibilidades de ganar? ¿Qué clase de demócrata es Ortega, que negocia cuando fracasa y se endurece cuando cree haber ganado? ¿Mantiene entonces una ética política a conveniencia?

De ser derrotados, Los Chuchos y las corrientes que los apoyan serían aniquilados por el lopezobradorismo, sin posibilidad alguna de tener poder de decisión en 2009 y 2012. También lo saben, y por eso tampoco dudemos que ya piensen en otro partido si así ocurre.

Son horas decisivas para el futuro del PRD.

De ser derrotados, Los Chuchos y las corrientes que los apoyan serían aniquilados por el lopezobradorismo, sin posibilidad alguna de tener poder de decisión en 2009 y 2012.

Irresponsabilidad
Martín Moreno
Es el sello de la casa. La forma de operar. El recurso del método. La irresponsabilidad como materia prima de la política mexicana. La manipulación. El chantaje. Así han sobrevivido y así seguirán. Los vicios están por todos lados: en el PRD, en el gobierno federal, en la lucha contra el narco y en el manejo de los dineros durante el foxismo. Lo sentimos: nada ha cambiado.


PRD. “Reconozco tu triunfo, pero deja que Alejandro Encinas sea el presidente del partido”, le pidió Andrés Manuel López Obrador a Jesús Ortega, cuyos asesores le recomendaron que aceptara, siempre y cuando AMLO hiciera pública su propuesta ante los medios.

¿Para qué respetar el voto de los perredistas, si es más segura, cómoda y redituable la negociación entre caudillos? Encinas y el lopezobradorismo no quieren abandonar, a la buena o a la mala, la pelea por la presidencia amarilla. “La única forma de que esto se solucione es que ustedes reconozcan que perdieron”, le escupe en cadena nacional Gerardo Fernández Noroña a Graco Ramírez. ¿Alguna duda? La amenaza como vía para dirimir diferencias. Al diablo con el diálogo respetuoso y con la honestidad política, si pueden ser suplantados por el chantaje y el golpe bajo.

Por eso la credibilidad del PRD ha caído tras el lodazal de su elección. Ahí está la encuesta de ayer: 46% ve peor al partido luego de su desastre electoral, mientras el tramposo Arturo Núñez dice, sin decirlo, que no hay para cuándo dar el nombre, ya no del ganador —sería una falsa etiqueta—, sino de quien se asumirá como líder acotado y sujeto a los caprichos del otro bando.

Condiciona Arturo Núñez recuento de votos en el PRD
Política - Martes 8 de abril (17:32 hrs.)




Cómputo tendrá que ser sin reglamentos paralelos, advierte
Dice que se han hecho acuerdos al margen y que el equipo de Encinas es el que más presiona


El Financiero en lìnea

México, 8 de abril.- La Comisión Técnica Electoral del Partido de la Revolución Democrática (PRD) condicionó retomar el cómputo de votos para la elección de presidente y secretario general de ese partido a que el conteo se realice con estricto apego al reglamento.

Arturo Núñez Jiménez, presidente de esa comisión, advirtió que en las condiciones actuales del partido "si saben contar que conmigo no cuenten para contar los votos, pues si la Comisión de Garantías tiene la facultad de anular los votos que quiere Alejandro -Encinas-, pues entonces que los anulen ellos".

Señaló que el Consejo Nacinal del PRD presionó a la Comisión Técnica Electoral al fijar un plazo de 72 horas para la entrega de los cómputos con apego al reglamento, pero tambien pide que presente por separado las casillas controvertidas y el reglamento no habla en ningún artículo de este tipo de casillas.

Por ello advirtió que si las instancias del partido presionan a la comisión para que concluya el cómputo de votos tendrá que ser sin reglamentos paralelos y sin criterios de última hora, y con estricto apego al reglamento.

De ser así, dijo, "no habría casillas con más votos ni casillas no instaladas, ni casillas atípicas, ni mucho menos nos mandarían a los delegados encinistas".

Arturo Núñez puntualizó que de entrada él no piensa retomar el cómputo de la elección, pues se han hecho acuerdos al margen del reglamento que no tienen razón de ser, y dejó ver que las principales presiones a este organismo fueron del equipo de Alejandro Encinas.

Defender el PRD
Alejandro Encinas Rodríguez
El Universal

Martes 08 de abril de 2008





Las elecciones perredistas del 16 de marzo pusieron al descubierto claroscuros del PRD:
1. La existencia de un partido nacional con una militancia que acudió masivamente a votar —más de un millón de participantes— en un ejercicio democrático y transparente.


2. Una incipiente vida orgánica con debilidad de los instrumentos para desarrollar un proceso electoral que garantizara el voto universal, libre, directo y secreto de los militantes. De nuevo, el padrón de afiliados dejó fuera por lo menos a 20% de quienes acudieron a votar; al tiempo que la pérdida de la autonomía del Comité Técnico Electoral lo subordinó a la lógica de los órganos de dirección y, por tanto, de las expresiones que los conforman, y al conflicto de intereses derivado del hecho de que sus integrantes, casi en su totalidad, son candidatos.


3. El profundo deterioro de la vida interna y de las relaciones entre los grupos y sus dirigentes, que ha cancelado no sólo los espacios mínimos de interlocución y construcción de acuerdos que debería mantenerse entre miembros de un mismo partido, sino del respeto entre quienes se identifican como compañeros.


4. La existencia de prácticas clientelares y corporativas, que han permitido construir una fuerza interna a costa de manipular la carencia de recursos y bienes de los sectores más empobrecidos de la población.


5. La existencia de un aparato burocrático acuerpado en torno a intereses, que ha hecho suyos los métodos del viejo régimen. Desde la manipulación de las carencias de la gente hasta el doble discurso, la simulación y el engaño, para encubrir sus verdaderos compromisos y aspiraciones e, incluso, el uso del fraude y la violencia.


6. La pérdida de autonomía política y subordinación de dirigentes del partido al gobierno de facto y a gobiernos estatales, y —como lo han señalado diversos medios— la injerencia de agentes privados quienes financiaron una “alternativa que pudiera contener al legítimo”.


La elección sacó a relucir lo bueno y lo malo del PRD. Tras diversas derrotas acumuladas, Nueva Izquierda se preparó para ganar a como diera lugar, tensaron la vida interna, coparon el aparato partidario, afinaron una estructura paralela, acumularon recursos, establecieron relaciones con los poderes de facto, impulsaron una campaña mediática bajo el esquema de representar una izquierda moderna, promovieron un Congreso Extraordinario en el que se establecieron reglas a modo, cambiaron al árbitro, le quitaron autonomía, tejieron alianzas sobre compromisos de candidaturas y recursos, presionaron el voto de los militantes desde espacios de gobierno y representación popular. ¿Por qué no lo consiguieron?


Porque quienes se presentaron como una izquierda moderna, socialdemócrata, apoyaron su mayoría en los liderazgos más atrasados y corporativos que han agraviado y desplazado de la vida partidaria a la mayor parte de la militancia. Porque se registró una rebelión de los miembros del partido contra los cacicazgos y prácticas de lo que podríamos llamar el neoperredismo corporativo que se ha enquistado en el aparato partidario y conculcado su vida democrática, y porque la militancia votó por una línea política clara, sin ambigüedades, de no reconocimiento al gobierno de facto.


En la peor de las tradiciones de la izquierda sectaria, quienes ayer se erigían como demócratas que iban a respetar los resultados hoy todo lo cuestionan: los resultados de los conteos rápidos, que no les favorecieron; la conducción del presidente nacional de partido a quien acusan de parcial; toman violentamente las oficinas del Comité Técnico Electoral reclamando la renuncia de sus miembros; irrumpen en las sesiones de cómputo; pretenden dar un albazo con un Consejo Nacional que deshonra su palabra y rompe compromisos y desconocen la autonomía a la Comisión Nacional de Garantías.


Lo cierto es que perdieron la elección. Perdieron sus entidades enclave (Colima, Hidalgo, Jalisco, Puebla, Iztapalapa) y los de mayor presencia partidaria (DF, Guerrero, Michoacán, Tabasco, Zacatecas). Pero lo cierto y lamentable también es que quienes dijeron defender la autonomía de este partido acuden al único recurso que les permitiría revertir nuestro triunfo, al TEPJF, a la intervención del Estado en que confían.

El PRD: ¿reconocimiento o litigio?
Alberto Aziz Nassif
El Universal

Martes 18 de marzo de 2008





El domingo pasado el PRD celebró elecciones para designar a sus dirigentes. Este proceso tuvo de todo, desde un amplio debate público entre las principales opciones, pasando por las múltiples denuncias de irregularidades antes y durante el día de los comicios, hasta lo que parece ser un resultado definido en base a dos encuestas de salida que dieron como triunfador a Alejandro Encinas. La singularidad de este proceso estuvo marcada no sólo porque el PRD es uno de los tres partidos gobernantes del país (tiene 127 diputados federales y 26 senadores, cinco gubernaturas y el Distrito Federal, cientos de municipios y diputados locales), sino porque ha optado no sólo por ser la oposición al gobierno panista, sino por desconocerlo, y esa decisión marcó los dos proyectos que se disputaron el gobierno interno del partido.

Después del conflictivo proceso de la pasada sucesión presidencial, el PRD quedó a sólo medio punto porcentual del ganador oficial, pero decidió desconocer los resultados y con ello abrió un amplio espacio al PRI, que desde el tercer lugar se ha vuelto un factor estratégico en la toma de decisiones. Así, un partido que perdió todos los estados en la elección presidencial del 2006, ha ocupado el lugar del partido que quedó en segundo lugar. La polarización y el conflicto electoral del 2006 nos dejaron un cuadro en donde se formó un eje de negociación y alianzas que desplazó al PRD hacia el lugar de una oposición radicalizada, en contra de un panismo aliado al PRI, que han definido la mayor parte de los proyectos de reforma. El dilema entre ser un partido con responsabilidad de gobierno y, al mismo tiempo, llevar el eje de la negociación a una posición radical, ha tensionado de manera central al partido del sol azteca. De tal forma ha crecido el conflicto interno, que las principales piezas del proceso de renovación de su dirigencia obedecieron a esa lógica política.


Sin duda, el eje de la definición interna del partido del sol azteca fue el conjunto de decisiones que se tomaron a partir del conflicto electoral del 2006, en donde gravitó de forma importante la figura de Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Los dos principales contendientes, Alejandro Encinas y Jesús Ortega, representaron el dilema de cómo ubicarse políticamente ante la decisión de no reconocer al gobierno de Calderón. Este dilema ha llevado a la creación de una especie de caricatura entre dos proyectos, uno moderado (el de Ortega) y otro supuestamente radical (el de Encinas). El dilema, falso o real, se tradujo en las principales ofertas de los candidatos: Encinas ofreció unificar en un solo mecanismo al PRD y al gobierno legítimo de AMLO; en cambio, Ortega se presentó como cabeza de un proyecto más pragmático para sacar adelante la agenda perredista a través de una presencia negociadora.


Los números de las dos encuestas de salida coincidieron en el resultado: Consulta Mitofsky estableció que Encinas ganó con 49.4% frente a 44.6% de Ortega y el Instituto de Mercadotecnia y Opinión (IMO) estableció 50.7% para Encinas y 42.3% para Ortega. Ante estos resultados, Jesús Ortega se dijo sorprendido y pidió esperar a los resultados oficiales que se tendrán entre el día de mañana y el próximo domingo. La primera conclusión de estos comicios confirma la importante presencia que mantiene AMLO dentro del partido, quien apoyó de forma abierta a Encinas.


La elección del PRD mostró una vez más las complicaciones para organizar elecciones en México. La insistencia de este partido en mantener procesos abiertos y concurrentes le ha generado conflictos desde la década pasada, en donde se han tenido que reponer procesos y se ha llegado a tener dirigentes interinos. Esta vez no fue la excepción, simplemente que hubo un proceso de mayor complejidad por el creciente tamaño del partido.


Las elecciones del partido del sol azteca son una expresión cercana a lo que han sido las elecciones mexicanas: antes del proceso se denunciaron los apoyos supuestamente irregulares de algunos gobiernos perredistas con algún candidato; también hubo fuertes problemas por el padrón, que tuvo denuncias por haber sido inflado de forma irregular; un instrumento poco confiable. El día 16 de marzo se instalaron la mayoría de las casillas, 4 mil 600 de un total de 4 mil 966; hubo casillas hasta en cinco estados de nuestro vecino del norte (California, Texas, Illinois, Washington y Nueva York); se imprimieron más de 29 millones de boletas y se esperaba una alta participación de más de un millón de militantes. Lo cierto es que se necesita un enorme aparato electoral para conducir un proceso de estas dimensiones. De nuevo en esta elección hubo todo tipo de prácticas irregulares: durante la jornada electoral no faltó el acarreo y el clientelismo, la violencia en algunas casillas y la desorganización. Los primeros reportes señalan que en Oaxaca, Veracruz, Chiapas y el estado de México es donde mayores incidentes se registraron.


Todavía es temprano para saber cómo transitará el PRD la siguiente fase de su proceso electoral si se confirman los datos de las encuestas de salida. Se pueden establecer al menos dos factores que jugarán, por una parte, el proceso de reconocimiento de los que perdieron, el cual puede llevar a legitimar el triunfo de Encinas o a impugnarlo mediante un complicado litigio interno; y por otra parte, estará propiamente el proceso político vinculado al resultado oficial, en donde puede haber una operación de acercamiento e inclusión (cicatrización), como el mejor escenario, o pueden darse luchas polarizadas y actitudes excluyentes, que puedan complicar de forma importante las próximas semanas en la vida interna de ese partido. Este será el dilema inmediato del PRD. Por lo pronto, veremos qué sucede en los próximos días…

Pretende Encinas dar ‘golpe de Estado’ en PRD: Acosta Naranjo
Jorge Octavio Ochoa
El Universal
Ciudad de México
Martes 08 de abril de 2008


Señala el secretario general del partido que el líder nacional del sol azteca y el ex candidato a su dirigencia buscan que no se instale el nuevo Consejo Nacional ni el Congreso


El secretario general del PRD, Guadalupe Acosta Naranjo, acusó esta tarde al presidente de ese partido, Leonel Cota Montaño, y al candidato de Izquierda Unida, Alejandro Encinas de pretender dar un "golpe de Estado" para que no se instale el nuevo Consejo Nacional ni el Congreso de ese partido.
Advirtió que antes de detenerse el cómputo a la elección de presidente y secretario general del PRD ya se habían logrado avances importantes y sólo sería cuestión de horas reanudarlo para concluir.

Sin embargo, a nivel de congresistas y consejeros, dicho cómputo ni siquiera se ha iniciado. "Entonces, lo que procedería es ordenar el inicio de dicho cómputo. Ese sí es un verdadero golpe de Estado al partido, es descabezar las instancias de dirección".

Sin embargo, dijo, "parece pretenderse que los problemas del partido se siguen resolviendo en el zócalo y no en las instancias del PRD", dijo al ser entrevistado hace unos momentos en la sede perredista.

"Se equivocan si creen que los problemas del partido se van a resolver en la calle de San Luis Potosí, en la sede del gobierno legítimo".

De esta forma, Acosta Naranjo insistió en que los problemas del PRD se resolverán en el marco de sus instancias legales, "quien juegue a anular las instancias colectivas de dirección está atentando contra la unidad del partido".

Igualmente, Acosta criticó la movilización convocada por Alejandro Encinas para el próximo sábado por la presunta defensa del PRD.

"No se puede convocar a un mitin para conservar la unidad del partido y a la vez pugnar porque no haya consejo ni haya congreso nacional. Esa es demagogia pura".

"Si de veras quieren salvar al partido que vayan a las instancias de dirección y que todo mundo nos atengamos a los resultados".

Pedirá Cota anulación si no hay ganador el 21 de abril
Notimex
El Universal
Ciudad de México
Martes 08 de abril de 2008


Anuncia el líder nacional que si no hay ganador de la presidencia de su partido el 21 de abril pedirá la nulidad de los comicios del pasado 16 de marzo


El presidente nacional del PRD, Leonel Cota Montaño, anunció que si no hay ganador de la presidencia de su partido el 21 de abril pedirá la nulidad de los comicios del pasado 16 de marzo.
Cota Montaño afirmó que por ningún motivo permanecerá al frente del PRD después del 22 de abril, "a menos que hubiera un acuerdo con un ganador y que tuviera que aplazarse la toma de posesión, pero si no hay ganador me voy".

En conferencia de prensa reconoció que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en una "frágil unidad" y se pronunció porque la Comisión Técnica Electoral retome el cómputo de la elección para presidente y secretario general perredista.

Anunció que esta noche se reunirá con la Comisión Técnica Electoral y la Comisión Nacional de Garantías y Vigilancia para tomar una decisión sobre el cómputo que se dio por concluido el lunes y que apenas incluyó 34% de las casillas.

El líder perredista explicó que la decisión sobre el cómputo de los comicios internos no será tomada de forma personal, sino colectivamente porque la determinarán los dos órganos encargados del proceso y el presidente del partido.

Leonel Cota dijo tener facultades para hacer una propuesta a estos órganos electorales con el fin de solucionar de forma institucional y estatutaria el conflicto, pues dijo que no hay condiciones para citar a una reunión del CEN.

Reconoció que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRD está dividido porque "es una caja de resonancia donde se expresan las dos posiciones de los candidatos a la dirigencia nacional y no tendría caso convocar en esas condiciones al Comité".

Por ello, Cota Montaño advirtió que él se encargará de hacer las propuestas y tomar las decisiones como presidente de este instituto político para solucionar a la brevedad la crisis que aqueja a su partido desde hace tres semanas.

Propone Ramírez Cuéllar fecha para interinato del PRD
Notimex
El Universal
Tlaxcala
Martes 08 de abril de 2008


Señala el ex candidato a la presidencia nacional perredista que para el 22 de abril deberá definirse la dirigencia interina; ´nadie puede dirigir un partido hecho pedazos´


El candidato a la dirigencia nacional del PRD, Alfonso Ramírez Cuéllar, señaló que para el 22 de abril deberá estar conformada la dirigencia interina perredista, para evitar una mayor división entre sus filas.

En conferencia de prensa, el aspirante a la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) perredista aseguró que "no tiene ningún sentido, ni nadie lo podrá hacer, dirigir un partido hecho pedazos".


Expuso que Jesús Ortega y Alejandro Encinas deben renunciar a sus aspiraciones de dirigir a ese partido político.


Consideró necesario refundar al partido "y repetir la hazaña de 1989 cuando fundamos el Partido de la Revolución Democrática (PRD)".


Explicó que "tenemos que formar una dirigencia interina, por un periodo de transición corto, la cual tiene que convocar a una asamblea constituyente de una nueva fuerza política del país".


Ramírez Cuéllar expuso que a partir del día 22, último de la gestión del actual presidente, Leonel Cota Montaño, "debe entrar la dirigencia interina".


Refirió que el proceso electoral interno se desarrolló con base en reglas no escritas "que impusieron atropelladamente los grupos internos más poderosos".


Detalló que en el PRD no había ya gobierno electoral, ni autoridad de carácter político, "se dio una contienda sobre la base de la ley de la selva", al indicar que "de esa forma ningún proceso electoral puede llegar a un feliz término".


Comentó que "la situación del partido es muy grave, muy difícil, por eso lo que le estamos pidiendo a Alejandro y a Jesús, es que tengan grandeza política y que ya declinen sus aspiraciones de dirigir al partido".

Núñez: se fracasó; avanza la anulación
Jorge Octavio Ochoa
El Universal

Martes 08 de abril de 2008


Al dar por cerrado el cómputo de la elección nacional del PRD, sin dar a conocer un ganador, Arturo Núñez, quien fungió como árbitro del proceso, admitió que se prefigura el escenario de anulación


jorge.ochoa@eluniversal.com.mx

Al dar por cerrado el cómputo de la elección nacional del PRD, sin dar a conocer un ganador, Arturo Núñez, quien fungió como árbitro del proceso, admitió que se prefigura el escenario de anulación.

Tanto Alejandro Encinas como Jesús Ortega rechazaron, por separado, la medida al considerarla “irregular y poco digna”. Coincidieron en que no se puede anular el proceso hasta que se concluya el cómputo.

De acuerdo con lo contado en 23 estados y las urnas en el extranjero, Encinas obtuvo 131 mil 784 votos contra 118 mil 247 de Ortega.

El conteo no incluyó entidades en conflicto como Chiapas, Oaxaca, Puebla, Tabasco, Veracruz y Zacatecas, ni del Distrito Federal, Guanajuato y estado de México.

En un comunicado, la Comisión Técnica Electoral lamenta no haber podido concluir los cómputos de zonas en conflicto debido a la “fuerte tensión política existente” y a la imposibilidad de fijar una fecha para la conclusión del cómputo en esas entidades.

Ortega y Encinas colocaron ayer en ruta de choque al PRD, luego de que el primero inició un procedimiento de impugnación ante el tribunal electoral federal y el segundo convocó a sus seguidores a movilizarse “en defensa del PRD”.

Ortega impugnó la Comisión Nacional de Garantías por atraer casillas en controversia, ya que temen que se excluyan votos válidos.

Al respecto, Encinas criticó a aquellos que confíen en el Estado para dirimir la controversia. Convocó a una movilización para el sábado.

Prevén división en PRD si contienda se decide en el TEPJF
Notimex
El Universal
Ciudad de México
Sábado 12 de abril de 2008


Espera el presidente del VI Consejo Nacional del PRD, Camilo Valenzuela Fierro, que una vez terminado el computo de la elección realizada el pasado 16 de marzo concluya el capítulo que está “costando muy caro al partido”


El presidente del VI Consejo Nacional del PRD, Camilo Valenzuela Fierro, aseveró que si el proceso interno de ese partido se decide en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) es casi segura la división del perredismo.

En entrevista, confió por ello en que la Comisión Técnica Electoral (CTE) que encabeza Arturo Núñez Jiménez concluya el cómputo de la elección, como le ordenó la Comisión Nacional de Garantías y Vigilancia (CNGV) del sol azteca.


Valenzuela Fierro dijo que espera que una vez terminado el conteo de la elección del 16 de marzo pasado "el resolutivo de la Comisión Nacional de Garantías sea el capítulo final de esta historia que está costando muy caro al PRD".


En la sede de la Expo Reforma, donde se espera la reanudación de la reunión perredista, el también ex candidato a la dirigencia nacional estimó que la próxima semana "pudiera determinarse el último capítulo de esta dolorosa situación postelectoral".


A pregunta expresa de si hay condiciones para concluir el conteo de la votación en 48 horas, consideró que "no las hay. La Comisión Técnica decidió terminar el conteo el lunes pasado y mantiene esa posición, en tanto que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) tiene tiempo desaparecido y no creo que aparezca para hacer suplencias".


Señaló que espera que la contienda no termine en manos del TEPJF porque "si se va por la vía de la judicialización ello nos llevaría, casi seguro, a la división del partido".


Por otra parte justificó la decisión de legisladores de su partido de mantener tomadas las tribunas de las cámaras de Diputados y Senadores para evitar la discusión de la reforma energética en el Congreso de la Unión pues, dijo, son autónomos.

Considera Ortega irregular cierre de cómputo
Jorge Octavio Ochoa
El Universal
Ciudad de México
Martes 08 de abril de 2008


Alejandro Encinas, de Izquierda Unida, expresó que pedirá a la Comisión Nacional de Garantías que concluya el cómputo e intervenga de oficio


Jesús Ortega amenazó con recurrir al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación en caso de que la Comisión Nacional de Garantías del PRD no revoque la decisión de la Comisión Técnica Electoral de dar por concluidos los cómputos de la elección nacional para presidente y secretario general de ese partido.
“Voy a hacer todo lo que sea necesario para impedir que prospere esta perversa intención de impedir que el PRD tenga órganos legalmente constituidos”, dijo anoche, luego de catalogar de “errónea y equivocada” políticamente la decisión de la Comisión Técnica Electoral de dar por concluidos los cómputos nacionales.

Dijo que es “irregular” el cierre del cómputo, pues no se incluyó el resultado de los nueve estados en conflicto, con lo que se deja fuera el 70% de las casillas de la elección.

Hubo “un veto de alguien”, dijo sin citar por su nombre a Andres Manuel López Obrador para no incluir esos votos.

Es aberrante, dijo, que se imponga sobre la voluntad de millones de perredistas este veto.

De acuerdo con las cifras de Ortega, con el 98% de las actas de escrutinio tiene una ventaja de 553 mil 438 votos (47.5%) contra 537 mil 807 de Encinas (46.16%).

Por tanto, advirtió que interpondrá una queja este martes ante la Comisión Nacional de Garantías, para que ordene a la CTE continuar los cómputos y, de no obtener una respuesta pronta y satisfactoria, llevarán el caso al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Acusó a Alejandro Encinas de interrumpir el cómputo y “reventar la elección”, pues desde el principio presionó a través de su equipo, para que fuera destituida la comisionada Graciela Sánchez Mota.

También fue Encinas, dijo, quien promovió sanciones contra los miembros de la Comisión Técnica Electoral.

Luego pidieron que el cómputo se hiciera con reglas y normas diferentes y todo el tiempo hizo lo necesario para reventar la elección, subrayó, por tanto “hay responsabilidades concretas y específicas en todo esto”.

Igualmente rechazó el argumento de Encinas de no acudir ante los órganos constitucionales pues, dijo, “el fue el primero en acudir al Tribunal Electoral” para denunciar que se violaron sus derechos de audiencia y defensa cuando se le obligó a exhortar a sus seguidores a detener el reparto de la carta de Andrés Manuel López Obrador.

Ortega hizo un llamado a Encinas a no caer en provocaciones con sus convocatorias a las movilizaciones.

“¡Cuidado que se pretenda suplantar la ley con movilizaciones. Necesitamos ser estrictos en la aplicación de la ley. Ninguna movilización puede presionar al partido para que se suplante nuestra ley”, subrayó.

Por su parte, Encinas dijo que pedirá a Garantías que concluya el cómputo e “intervenga de oficio”, y advirtió que ni el CEN ni el Consejo Nacional pueden intervenir para calificar la elección.

Para resolver el total de los cómputos, el CTE debe acatar la resolución de la CNGV, convocar a las sesiones de cómputo y ejercer su autoridad.

En este sentido, dijo no compartir la opinión del senador Arturo Núñez de que sin el 80% de cómputos, la elección puede ser anulada, ya que todavía se puede concluir en los estados que faltan y están en tiempos para hacerlo.

La CTE no está cumpliendo con el resolutivo de la CNGV ni con los términos y plazos acordados por lo que tiene la obligación de continuar y terminar el cómputo.

Dijo que si Ortega acude al Tribunal, “es la mejor evidencia de que perdió”.

Aseguró que el no asistirá, bajo ninguna circunstancia, a dicha instancia.

Sólo acatará las resoluciones de la CNGV.

Por la noche, Encinas manejó las mismas cifras de la CTE, sin computar los nueve estados en conflicto.

Entra en contradicción Comisión de Garantías del PRD
Jorge Octavio Ochoa
El Universal
Ciudad de México
Lunes 07 de abril de 2008


Mientras Renato Sales dijo que la Comisión de Garantías no entrará a computar votos, Ernestina Godoy, presidenta de ese órgano, declaró el fin de semana que debe ir determinando las casillas que no pueden entrar a los cómputos


La controversia por las irregularidades cometidas en la pasada elección del PRD empezó a minar también a la Comisión Nacional de Garantías de ese partido, encargada de calificar, en definitiva, dichos comicios.

Renato Sales Heredia, miembro de dicha Comisión, advirtió que lo que se requiere en estos momentos de crisis “es sumar ya todo y terminar la suma de casillas.


Dijo que la Comisión de Garantías no entrará a computar votos, porque no es su función; “con nosotros no cuenten para contar”, sentenció.


Sin embargo, Ernestina Godoy, presidenta de ese órgano, declaró el fin de semana que Garantías, junto con la Comisión Técnica Electora, en presencia de los representantes, debe ir determinando las casillas que no pueden entrar a los cómputos.


En abierta contradicción con Ernestina Godoy, dijo que la instrucción que dio la Comisión a su cargo es que en 48 horas concluya el cómputo de todas aquellas casillas que no presentan ninguna controversia


Luego de esto, las que presenten controversia deberán ser “remitidas en un plazo de 24 horas posteriores al término de 48 a la Comisión Técnica Electoral, en Monterrey 50, para que ésta, ya en presencia de la CNG termine el cómputo”.


“Lo que quiere decir que será la CNG, junto con la CTE y en presencia de los representantes, quien vaya determinando las casillas que no pueden entrar a los cómputos, ya que en una metodología clara, con criterios generales, homogéneos, eso es lo que va a pasar”.


“Lo importante es que el partido tenga, en el menor tiempo posible, resultados y puedan tomar posesión los dirigentes del partido, eso es lo importante”.


Sin embargo, Sales Heredia declaró la Comisión de Garantías no entrará a computar votos, porque no es su función, “con nosotros no cuenten para contar”.


Dijo que tampoco se anularán, de facto, parte de las casillas, “solamente se busca acelerar lo que falta de computar y apegarse al reglamento”


Heredia denunció, incluso, que estaban circulando hojas, sin membrete ni firmas, atribuidas a la CTE, en las que venían unas reglas “que se modificaron a contentillo, que se modificaban de un momento a otro”.


“Eso no tiene validez, lo que tiene validez es el reglamento, si a esas vamos”, sentenció.


“Si el reglamento te dice que estos paquetes pueden abrirse cuando hay alteraciones o cuando obviamente no coincida el número de votos o errores en el cómputo”.


“No se van a hacer a un lado paquetes, ni se le va a sustituir del cómputo; se trata sólo de dar un empujoncito a la CTE para que termine, pero que termine esa Comisión, no nosotros”.


Dijo que la CTE tiene que salir, dar el cómputo final y dar a conocer las casillas controvertidas y decir de cuánto es ese cómputo de casillas controvertidas.


“Sólo se le pide a la CTE que se apegue al reglamento de elecciones en lo que resta del cómputo y que se apegue al artículo 98 y 99 del Reglamento, y que no circule hojas sin membrete y sin firma, si es que es de ellos”.

“La Comisión Técnica tiene que sumar y dar un resultado, pero le toca a ella. Nosotros queremos que ya termine porque si no lo hace, los medios de impugnación contra los cómputos se siguen retrasando.


“Nosotros tenemos siete días para resolver y los representantes o candidatos tienen cuatro días para impugnar, entonces tenemos el tiempo encima. Ahorita tendríamos que estar resolviendo medios de impugnación”.


Advirtió que el recurso interpuesto por Nueva Izquierda no ayuda en mucho, no ayuda gran cosa porque ¿qué es lo que va a decir en todo caso el Tribunal? Pues apéguense al reglamento, que es lo que estamos diciendo nosotros.


“En fin, yo creo que están preocupados por la interpretación que se hace de algo que no está sujeto a interpretación. Si la resolución dice: apéguese al reglamento, pues bueno, eso es lo que hay que interpretar.


“Hay quienes piensan que se van a separar las casillas y se van a afectar los cómputos. No, si está diciendo que se apeguen al reglamento es que terminen de contar. Si tienen problemas en alguna casilla tanto uno como el otro, entonces esas son los que habrá que ver por qué se atoraron de esa manera. Lo único que busca la resolución es desatorar el cómputo”.

Del cardenismo al lopezobradorismo
Demetrio Sodi de la Tijera
El Universal

Lunes 31 de marzo de 2008





Muchos militantes y simpati-zantes de izquierda se preguntan dónde perdió el rumbo el PRD, dejando de lado sus valores éticos y su razón de ser en la vida política nacional.

Desde su fundación en 1989, como resultado de una alianza entre los partidos de izquierda, PMS, PRT y PMT, y la Corriente Democrática que había sido expulsada del PRI por exigir la democratización del partido y defender el nacionalismo revolucionario, el PRD se comprometió a luchar por un país más democrático y justo.


Su lucha fue contra el autoritarismo y personalismo presidencial, contra el partido de Estado, el fraude electoral y el uso de recursos y programas públicos en beneficio de un partido o una persona y a favor de un modelo de desarrollo con mayor equidad e igualdad económica y social.


En los 11 años (1989-2000) en que Cuauhtémoc Cárdenas mantuvo el liderazgo, la acción política se apegó, con pocas desviaciones, a valores éticos y sociales que lo distinguieron del PRI y el PAN. Cárdenas limitó la acción de las corrientes e impidió la llegada a la dirección del partido de grupos clientelares que se enriquecían y fortalecían con los programas sociales del gobierno de la ciudad.


Con la llegada de López Obrador a la dirección del partido y sobre todo a la Jefatura de Gobierno del DF en 2000, no sólo se dejó de perseguir a estos grupos sino que los convirtió en sus aliados principales y en la base de su gobierno. El PRD, bajo el liderazgo unipersonal y excluyente de AMLO, abrió las candidaturas a antiguos enemigos del partido sin importar sus principios e ideología.


Para López Obrador todo es válido con tal de llegar al poder, por lo que falsificó su residencia para ser candidato a jefe de Gobierno, se alió con Bejarano para crear una base política a través del condicionamiento a la gente más pobre de los programas sociales, y promovió una red de corrupción y chantaje desde el gobierno de la ciudad para conseguir recursos para su campaña presidencial.


Después de su fracaso en las elecciones del 2006, en lugar de apostarle al partido, como lo hizo Cárdenas en 1989, apostó a consolidar su liderazgo personal y garantizar su candidatura para el 2012.


Su liderazgo, si bien ha dado más votos y legisladores al PRD, ha provocado que se pierdan los valores y principios que dieron origen al partido, como quedó demostrado en las elecciones de hace ocho días.


Quienes en su momento, yo en 2003, denunciamos la pérdida de valores y las mafias que se estaban apoderando del partido en el DF, fuimos marginados y perseguidos por AMLO y sus seguidores y tuvimos que alejarnos o salir del PRD; otros se callaron ante la posibilidad de ganar en 2006 y están hoy a punto de perder o salir del partido.


La historia del PRD en estos ya casi 20 años de existencia tiene dos claros periodos: el de su construcción y lucha por los principios y un proyecto nacional con Cárdenas, y el del pragmatismo, clientelismo, falta de ética y lucha por un proyecto personal con López Obrador.


De salir ganador Encinas se impondrá el proyecto personal sobre el partido, de ganar Ortega el PRD quedará roto a la mitad; la única alternativa es un presidente interino y la refundación al margen de liderazgos y corrientes como lo propone Cárdenas.


Llegó la hora al PRD y a los auténticos militantes de izquierda, le siguen apostando sumisos a un liderazgo mesiánico o se rebelan y tratan de recuperar el partido de valores y principios que requiere la izquierda mexicana.

“El líder del perredismo nunca ha tenido poder”
Andrés Becerril
El senador Pablo Gómez Álvarez asegura que, más que una elección, el proceso que vivió el PRD de hace 24 días aún sin resultado oficial, en realidad es “una riña entre grupos burocráticos que disputan los puestos y la administración del partido del que se han apoderado”.

Gómez Álvarez, presidente nacional del PRD en 1999, después de la anulación de la elección entre Amalia García y Jesús Ortega, reconoce que “la disputa por la administración del partido ha sido el fenómeno que mayor daño le ha causado al PRD en su historia”.

Sostiene que mientras no se supere esa situación, el PRD va a seguir en crisis como la que vive. “Hay que ir a la raíz del problema, hay que buscar un entendimiento y un acuerdo para que el partido se maneje de otra manera, en donde no importa tanto quién sea el presidente”.

Porque dice, el presidente del PRD no tiene tanta fuerza decisiva dentro del partido. “Ningún presidente la ha tenido ni (Cuauhtémoc) Cárdenas ni nadie. Eso, claro, desde afuera no se ve, pero nosotros sí lo sabemos, bueno, nadie nos cree, ese es el problema, pero los hechos concretos indican que el presidente nunca ha sido pieza decisoria”.

Según el senador Gómez, líder estudiantil en 1968, dentro del PRD hay una estructura colegiada de dirección, sólo que “el problema es que la mayoría de los espacios de esa estructura colegiada está mayoritariamente copada por grupos burocráticos que lo único que quieren es la administración del partido y los puestos, eso es lo que hay que superar”.

Para darle dimensión a lo que se refiere el ex presidente perredista, los números indican que el PRD pesa mucho en puestos legislativos y de gobierno, pues es la segunda fuerza política de México, tiene 127 diputados y 26 senadores; gobierna en cinco estados y el Distrito Federal, sin contar los cientos de municipios que administra, y además tiene más de 424 millones de pesos para gastarse este año.

Como para dar una idea del por qué de la situación que vive el PRD, Pablo Gómez explica que es un partido popular, de masas, “pero que tiene una dirección burocrática que no encabeza al partido y, en cambio, sólo lo administra. Entonces, cuando se vinieron estas elecciones las del 16 de marzo se crearon dos principales alineamientos, uno con (Alejandro) Encinas y otro con (Jesús) Ortega a la cabeza, que están integrados por grupos que representan esa estructura burocrática”.

En este sentido, es que el ex presidente perredista se refiere a la riña entre grupos “porque hay no sé cuantas casillas, que no son muchas, pero que una parte quieren que se cuenten y otra que no, es decir, cada quien tiene su paquete de los que no quieren que se cuenten. Eso provoca que no termine el cómputo, que ya está muy avanzado en los estados, pero que en esas casillas hay un problema en los órganos encargados de hacer el cómputo”.

Dice el legislador, sin embargo, que ese no es el problema, y que es una manifestación del problema.

“El problema está en esa contradicción de lo que es el partido y lo que ha sido en los últimos años su dirección, una dirección administrativa, burocrática, que no ejerce ningún tipo de liderazgo, porque no le interesa, porque lo que le interesa es administrar”.

Asegura que la dirección del PRD “no apela al partido, no lo convoca, no lo organiza, no le informa nada, está alejado del funcionamiento de un partido popular, de masas, ese es el problema”.

Gómez Álvarez espera que la crisis por la que atraviesa su partido ayude a la comprensión del problema y que, al final, en la forma que se resuelva, se tenga mayor conciencia de la existencia de este fenómeno y se busque una adecuación entre la dirección y lo que es el partido en la realidad.

“El PRD nació en la calle, no es un partido que haya nacido de acuerdos entre grupos y entre políticos, nació en la calle, en el seno del pueblo, en los barrios, en los municipios, y pienso que hay que reconocer que su origen le da su característica y que esa debe ser reconocida por los que lo dirijan”, señaló el legislador.

Según Gómez, la situación de su partido “no es un problema intestino del PRD, sino un problema político del país, porque, claro, la prensa le da una connotación superficial al problema porque no ven más a fondo, aunque no está obligada a verlo. Ven lo que dicen unos y otros, pero lo que dicen unos y otros es producto de la riña entre los grupos burocráticos, que no corresponden a la realidad del partido y lo que es éste, y eso es lo que hay que resolver; no la existencia de grupos, porque éstos existen en todos los partidos, sino su carácter burocrático.

“El PRD no puede seguir viviendo con grupos que tienen carácter burocrático en su mayor parte y que dispután el control administrativo del partido, eso es lo que estamos viendo. Detrás de todo esto no es que haya posiciones políticas tan diferentes, son matices que existen, junto con muchos otros, pero ese es el fondo: el control administrativo del partido”, concluyó.

CHEQUEN LOS TIEMPOS EN LAS TRES SIGUIENTES NOTAS.... AHI LES VAN:

PRIMERA NOTA:

Se aplicará el reglamento en cómputo de elección en PRD: Núñez
Notimex
México, 14 Abr (Notimex).- El senador Arturo Núñez Jiménez advirtió que de reiniciarse este martes el cómputo de votos de la elección del PRD para la dirigencia nacional, no habrá espacio para arreglos políticos sino que se aplicará estrictamente el reglamento.

Núñez explicó que se pospuso, en primera instancia la instalación de las mesas de cómputo hasta las 19:00 horas.

Sostuvo que el cómputo, si es que se reinicia, será con estricto apego a los artículos 98 y 99 del Reglamento Interno de Elecciones del PRD; por ello, no habrá espacios para los arreglos políticos en esta parte del proceso electoral.

El legislador tabasqueño aseguró que volver al juego de escuchar a los candidatos y hacerles caso de lo que quieren imponer en cuanto a criterios de cómputo "sería tanto como asumir que no se instalarán las mesas de cómputo".

Advirtió que si en las sesiones de cómputo estatal para la elección nacional los representantes de los candidatos intentan presionar, "nosotros seremos quienes se levanten de la mesa, porque ellos no pueden intervenir de esa manera en los cómputos".

De igual forma, agregó, si tratan de argumentar indebidamente, retrasar las sesiones u obstaculizar el avance del cómputo.

Núñez manifestó: "es momento de que se tomen decisiones de autoridad electoral y se apliquen las reglas como lo señalan las normas internas del partido".

El señador perredista por Tabasco aseveró que "esa es la mejor muestra de la voluntad de la Comisión Técnica Electoral por que haya un cómputo oficial, porque esa sesión debió haber concluido desde el 23 de marzo pasado".

A su vez, la representación de Nueva Izquierda indicó que presentará un recurso de "inejecución ante el Trife", porque hasta las 21:00 horas de hoy la Comisión Técnica Electoral no había reiniciado el cómputo de votos según se lo había ordenado la Comisión Nacional de Garantías y Vigilancia.

El representante de Jesús Ortega ante la Comisión Técnica Electoral (CTE), Rafael Hernández Estrada, dijo además, que el equipo de Alejandro Encinas Rodríguez es quien ha obstaculizado los cómputos.

Acusó que "Encinas y sus representantes están presionando a la Comisión Técnica Electoral para evitar que se instalen las sesiones de cómputo porque saben que los resultados para presidente, congresistas y consejeros nacionales no le favorecen".

Ya se venció el plazo que la Comisión Nacional de Garantías le dio a la CTE para que termine el conteo y a pesar de que citó para hoy a las 11:00 horas a las delegaciones estatales para reinstalar los cómputos, aún no hay nada, indicó.

SEGUNDA NOTA: 15.50 HS.

Confirman renuncia Núñez y Cancino
Redacción Exonline
Arturo Núñez y Edmundo Cancino confirmaron su renuncia en el Comité Técnico Electoral del PRD al no haber avances ni disposición para sacar adelante la elección interna del partido, que mañana cumple un mes de haberse realizado.

En conferencia de prensa dijeron que toman la decisión, que se había anticipado, para que otras instancias del partido nombre un interinato

Destacaron que sus herramientas para computar eran insuficientes y por eso tuvieron que evaluar si mantenían o no la situación, y por ello dimitieron.

Informaron que giraron instrucciones a los comités estatales de resguardar los documentos del proceso y se pueda sacar adelante los comicios por estado.

Los perredistas dijeron que entregan a Leonel Cota y a Camilo Valenzuela sus renuncias por escrito que se hacen efectiva hoy.

TERCERA NOTA 19:39 HRS.


Hace feliz a Encinas renuncia de Comisión Electoral
Notimex
El candidato de Izquierda Unida a la dirigencia del PRD, Alejandro Encinas, manifestó su beneplácito por la renuncia de los miembros de la Comisión Técnica Electoral (CTE), al argumentar falta de condiciones legales para concluir el cómputo de la elección interna.


En conferencia, Encinas Rodríguez aclaró que con la desaparición de la CTE se dará paso a la Comisión Nacional de Garantías y Vigilancia para que atraiga la conclusión del cómputo en calidad de único órgano jurisdiccional y facultado para calificar la legalidad de la elección.


Aseguró que las reformas a la norma electoral del Partido de la Revolución Democrática (PRD) efectuadas en el 10 Congreso Nacional son el fondo del problema, porque se hicieron a modo para favorecer a un candidato en especial.


El ex jefe de gobierno capitalino reconoció que en esa modificación estatutaria se dejó a la Comisión Técnica Electoral sin autonomía, supeditada a un comité político que aún no existe, carente de facultades y de recursos.


Reconoció que es difícil que antes del 22 de abril quede resuelto el conflicto postelectoral, y por lo tanto pidió al presidente nacional del PRD, Leonel CotaMontaño, que permanezca en el cargo después del 22 de abril y hasta que se resuelva el proceso.


Encinas Rodríguez consideró que así se garantiza la estabilidad del partido, ya que no existen causas para la nulidad de la elección o para nombrar un presidente interino.


Por otro lado, advirtió que si el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le levanta la mano a Jesús Ortega se presentaría un deterioro muy grave en el PRD y se profundizaría la división.


Reiteró que no acudirá a dicho tribunal para inconformarse, porque "yo no quiero que me levante la mano sino que sean los militantes del PRD los que me declaren vencedor de la elección".

Vamos complementando