SALTILLO, Coah., 11 de agosto (apro).- El obispo Raúl Vera López exigió hoy la renuncia del secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, debido a que durante su gestión poco ha hecho para impedir la muerte de más trabajadores mineros.
Luego de dar a conocer un reporte de la anomalías con que opera la mina Lulú, la misma que colapsó el pasado 6 de agosto y que provocó la muerte de dos trabajadores, el prelado recordó que tras las conclusiones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), sobre el caso Pasta de Conchos, emitidas en marzo pasado, la dependencia federal estableció que había implementado medidas para garantizar la seguridad de los trabajadores del carbón.
"La OIT estableció que eso es un reconocimiento tácito de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), de su responsabilidad por omisión en la tragedia de Pasta de Conchos, por lo que esta vez, es también responsable de lo ocurrido en la mina Lulú.
"Ahora vemos que ahí, en 5 años que tiene de explotación y beneficio, jamás se ha realizado una inspección por parte de la STPS", dijo.
Acompañado de tres trabajadores de la mina Lulú --propiedad del empresario Salvador Kamar--, así como de integrantes del Centro Diocesano de Derechos Humanos "Fray Juan de Larios" y de integrantes y deudos de "La Familia de Pasta de Conchos", Vera López hizo un recuento de deficiencias en la mina colapsada la semana pasada.
Entre otras cosas, mencionó que los trabajadores deben aportar su casco y tienen prohibido sindicalizarse; también que tras el siniestro, la dirección de la empresa les dijo que si querían rescatar los cuerpos, lo hicieran por sus propios medios, sin equipos de seguridad.
También que para avisar del accidente, tuvieron que caminar 7 kilómetros hasta un puesto de donde pudiera darse la alarma, pues no contaban con equipo de transporte, ni siquiera para movilizar heridos.
"Inclusive, un trabajador que requería atención médica fue llevado en el camión de transporte de personal, pero no a una clínica sino a la parada del camión de transporte público.
Junto con Cristina Auerbach, de Pastoral Laboral, y Blanca Martínez, quien hoy asumió la dirección del centro "Fray Juan de Larios", Vera López indicó que luego de recabar testimonios de trabajadores, el pasado fin de semana, se pudo establecer que en el último mes habían ocurrido al menos 3 incidentes en los que estuvieron a punto de perder la vida varios trabajadores.
El obispo de Saltillo, exigió al gobierno del estado que el Ministerio Público realice una investigación imparcial, pues el día de los hechos ni siquiera ingresó a la mina.
También urgió al Senado de la República a que ratifique los convenios 81, 85, 174 y 176, de la OIT signados por México desde hace años, pero cuya falta de ratificación impide su aplicación permitiendo que los accidentes industriales mayores, queden en la impunidad.
Un grupo de trabajadores de la mina Lulú, que acompañaron al obispo Vera López, exigieron una indemnización inmediata, pues se niegan a regresar a esa fuente de empleo que consideran insegura.