¿solo una mexicana?

El ministro de Seguridad de Ecuatoriano, Gustavo Larrea, no descarta que entre los 22 cadáveres que están en la morgue de Quito, se encuentre un profesor de la UNAM de nombre Juan González del Castillo.

Quito.- El ministro de Seguridad de Ecuador, Gustavo Larrea, declaró hoy que hay sospechas de que habría más mexicanos entre los 22 cadáveres que están en la morgue de Quito tras la incursión militar colombiana que atacó el sábado pasado un campamento clandestino de las FARC en territorio de Ecuador.

Larrea indicó que no existe aún información definitiva disponible, pero pidió que en caso de que haya familias en México que sospechen que sus parientes puedan estar entre estos muertos, remitan copias de huellas dactilares y elementos requeridos para pruebas de ADN.

Explicó que por el estado de descomposición de los cadáveres, la identificación fotográfica no es posible pero que métodos tecnológicos modernos permiten establecer las identidades y que, en caso de ser favorable, implicará la devolución de los cadáveres a México.

La presencia de mexicanos entre las víctimas del operativo militar fue explicada por Larrea al decir que al parecer serían estudiantes y profesores de la Universidad Autónoma de México (UNAM) que “realizaban una investigación académica sobre la única fuerza insurgente que aún hay en Latinoamérica”.

Hasta este miércoles la embajada de México en Quito indicó que era posible que entre los muertos esté un profesor de la UNAM, de nombre Juan González del Castillo.

Antes Lucía Morett, de 25 años, hospitalizada en Quito tras haber sido rescatada por militares ecuatorianos de Santa Rosa, lugar donde estaba el campamento guerrillero, fue reconocida como mexicana por las autoridades diplomáticas de ese país en Quito.

Sus familiares negaron que ella sea guerrillera, pero Lucía Morett no lo hizo al ser entrevistada el martes último.

El sábado último, militares colombianos ingresaron en territorio ecuatoriano para atacar un campamento de las FARC en el que murieron “Raúl Reyes”, segundo al mando de las FARC; “Julián Conrado”, otro líder guerrillero, y otras 22 personas de las que se ha sostenido que también eran integrantes de esa organización.

Mexicana herida en acción contra 'Raúl Reyes' recibía cursos de explosivos de las Farc
Lucía Andrea Morett Álvarez aseguró a EL TIEMPO, desde su habitación en el Hospital Militar de Quito, que realizaba una investigación sobre el grupo insurgente para su tesis superior de Filosofía.


Junto con ella, en la madrugada del sábado primero de marzo, murió su compatriota y presumiblemente su alumno, Juan González del Castillo. Los dos pertenecían a la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Según datos encontrados en los computadores encontrados en el campamento destruido y que supuestamente pertenecen a alias Raúl Reyes, los dos mexicanos recibían adiestramiento, que incluía manejo de explosivos.
Nacida y radicada en el Distrito Federal de México, Lucía Andrea, identificada en las filas insurgentes como 'Alicia', es parca al responder a los medios que tuvieron acceso a su habitación del quinto piso del centro hospitalario. A este lugar fue trasladada el domingo pasado, junto a dos colombianas heridas, que fueron rescatadas por el ejército ecuatoriano en el sector de Santa Rosa, donde también se encontraron los cadáveres de otros 21 supuestos subversivos.
Morett Álvarez viajó el pasado 10 de enero de México a Cuba, y de ahí a Quito. Su regreso a México estaba programado para el próximo 11 de marzo.
Con palidez en su rostro, y voz apagada, relató: "Estaba dormida cuando recibimos un primer ataque aéreo. Luego de dos o tres horas después fuimos atacados de nuevo".
Sin embargo, evadió toda respuesta relacionada con su tiempo de permanencia con el grupo irregular de Colombia, o por cuánto tiempo estuvo en Ecuador y en el campamento destruido.
Pero según la información reservada que manejan las autoridades mexicanas, alguna ya publicada en medios de ese país, Morett tiene antecedentes de haber participado acciones a favor de la liberación de los hermanos Cerezo Contreras, señalados en México como participantes de movimientos subversivos.
Su familia dice que estuvo de "visita" haciendo turismo, aunque reconoció que es una "joven crítica y comprometida", señaló un familiar al diario mexicano El Universal. Según el medio, el 30 de octubre de 1998, siendo estudiante de preparatoria, Andrea fue detenida por "faltarle al respeto" al entonces presidente Ernesto Zedillo Ponce de León, cuando éste encabezada un acto público en instalaciones de la UNAM en Texcoco.
La mexicana fue detenida cuando lanzaba proclamas a favor del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (Ezln) en exigencia del cumplimiento de los acuerdos de San Andrés Larrainzar, que por entonces se discutían en Chiapas.
A más del activismo en agrupaciones de extrema izquierda, Morett también participó en un movimiento para exigir la liberación de los hermanos Cerezo Conteras, detenidos tras ser acusados de ser integrantes de la guerrilla mexicana de las Farp, que se adjudicó la autoría de bombazos contra bancos en el 2001, según relata el rotativo.
El alumno muerto, Juan González del Castillo, viajó el pasado 31 de enero de México a Panamá, y de ahí a Quito. González del Castillo era un investigador académico sobre movimientos y gobiernos de izquierda.
Según publicó este miércoles el diario mexicano La Jornada, autoridades mexicanas dieron a conocer que Colombia entregó supuestas pruebas de la vinculación de Morett y González con las Farc.
Según medios mexicanos, en los computadores de alias Raúl Reyes también se hallaron indicios de la vinculación de las Farc con organizaciones criminales mexicanas, en especial con integrantes del cártel de Sinaloa, entre ellos Arturo Beltrán Leyva (el barbas) señaló La Jornada.
Las autoridades ecuatorianas esperan cumplir con la identificación y autopsia del cuerpo para entregarlo a las autoridades mexicanas, mientras Morett será puesta a disposición de la justicia, según informó el ministro de Defensa ecuatoriano, Wellington Sandoval.

Prevé SRE más de dos mexicanos muertos en Ecuador
Natalia Gómez / corresponsal
El Universal
México
Jueves 06 de marzo de 2008

Destacan fuentes de la cancillería que el gobierno de México está en permanente contacto con autoridades ecuatorianas para identificar a los que se presumen son mexicanos y que perecieron tras bombardeo a las FARC

Después de cinco días del bombardeo del Ejército colombiano a un campamento de las FARC en territorio ecuatoriano, la Secretaría de Relaciones Exteriores reconoció que podría haber más de 2 mexicanos muertos, producto de este ataque.

Fuentes de la cancillería dijeron que el gobierno de México está en permanente contacto con autoridades ecuatorianas para lograr la identificación positiva de los que se presume son mexicanos.

Anunciaron que hasta el momento no se ha podido establecer plenamente la identidad por el estado en el que se encuentran lo muertos después del incidente, señalaron que se espera que en los próximos días haya pruebas forenses que permitan esclarecer esta información .

Podrían 10 mexicanos haber muerto en ataque colombiano
EFE
QUITO.- Una decena de ciudadanos mexicanos podrían estar entre los muertos en el ataque militar colombiano llevado a cabo el pasado sábado contra un campamento de las FARC en Ecuador, afirmó hoy el ministro coordinador de Seguridad Interna y Externa ecuatoriano, Gustavo Larrea.

Larrea dijo a los periodistas que podrían ser "más de diez, un grupo numeroso" de las al menos 24 personas que fallecieron en la operación "Fénix", en la que murió el "número dos" de las rebeldes Fuerza Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), "Raúl Reyes".

El ministro precisó que era un grupo de alumnos y profesores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y que, según esa casa de estudios, "vinieron a hacer una investigación sobre la única fuerza insurgente que pervive en Suramérica hoy".

Al menos cinco familias mexicanas se han puesto en contacto con las autoridades de ese país para saber si sus parientes están entre los fallecidos en el ataque, por lo que los forenses ecuatorianos harán las pruebas pertinentes para comprobarlo, explicó Larrea.

Lucía Andrea Monett, ciudadana mexicana, de 21 años y estudiante de Filosofía, fue una de las tres supervivientes encontradas por las tropas ecuatorianas en el campamento de las FARC, tras el ataque colombiano.

El padre de la joven, Jorge Monett, tiene previsto llegar hoy a la capital ecuatoriana para ver a su hija, que es atendida en el Hospital militar de Quito de las heridas que sufrió durante la operación militar colombiana.

Monett ha agradecido la atención humanitaria dada por el Gobierno ecuatoriano a su hija y explicado que ella salió de México para asistir a un Congreso Bolivariano que se celebró la semana pasada en Quito.

"Entendemos que su calidad es de una atención humanitaria y que tan pronto como ella esté bien de salud la pondrán a disposición de las autoridades mexicanas para que regrese a México", señaló Monnett, cuya hija es estudiante de Filosofía y Letras de la UNAM.

El ministro de Defensa ecuatoriano, Wellington Sandoval, dijo ayer que cuando las tres heridas se recuperen irán a manos de la justicia ecuatoriana, ya que se trata de "son extranjeras que han sido capturadas armadas dentro de territorio ecuatoriano".

Las tres mujeres fueron visitadas el miércoles por Valeria Ganvoni, delegada regional del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), quien señaló que debía comprobar su estado de salud y el trato que se las daba y propiciar la búsqueda de sus familiares.

Arrebatan 70 espacios a la UNAM
Leticia Robles De La Rosay Héctor Figueroa
Conquistas del movimiento encabezado por el Consejo General de Huelga (CGH) de 1999-2000, en la UNAM existen al menos 70 salones o cubículos estudiantiles autónomos donde los jóvenes trotskistas, anarquistas, marxistas, leninistas, espartaquistas o guevaristas lo mismo exhiben películas que organizan círculos de estudios o incluso venden comida corrida.

Oficialmente conocido con el nombre de Justo Sierra, pero rebautizado por el movimiento estudiantil como Che Guevara, el auditorio principal de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM es el principal símbolo de los espacios conquistados por los otrora huelguistas y que les fueron respetados por el ex rector Juan Ramón de la Fuente.

Ahí, en ese histórico auditorio, los jóvenes activistas universitarios instalaron, entre otras cosas, el Comedor Popular Vegetariano Che Guevara, donde la comida corrida cuesta 20 pesos.

Pero la venta de quesadillas, tortas, dulces, copias fotostáticas, impresiones y servicio en computadoras es común en prácticamente todas las unidades académicas de la UNAM, tanto a nivel licenciatura como en los 14 planteles del bachillerato.

Los espacios, argumentan los jóvenes, fueron conquistados por ellos por su lucha en las calles y con la presión del cierre de las instalaciones universitarias; en esos cubículos, como pudo constatar Excélsior, se realizan manifiestos, se editan revistas, se hacen enlaces internacionales con organizaciones simpatizantes, se denuncian arbitrariedades de las autoridades y se desarrollan actividades culturales.

La pelea por los cubículos es constante en la UNAM; en noviembre pasado, el director de la Facultad de Derecho, Fernando Serrano Migallón, ordenó la recuperación del salón D-201, ocupado por los estudiantes radicales, e incluso colocó rejas de metal para evitar que los jóvenes lo retomaran.

Así, desde ese momento, el movimiento estudiantil autónomo y crítico de la Facultad de Derecho sólo tiene el salón D-301 para realizar sus actividades de concientización a sus compañeros sobre la importancia de la lucha política.

Hace cuatro años, el director de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Fernando Pérez Correa, intentó la recuperación de los salones ocupados por el movimiento estudiantil en ese plantel, lo cual ocasionó la movilización de los jóvenes.

Los espacios estudiantiles en el territorio unamita se dividen en dos: los autónomos, que en su mayoría son dominio de la llamada ala ultra del movimiento estudiantil; y los institucionales o formales que adjudican las direcciones de los planteles para las actividades de esparcimiento y círculos de estudio.

Este diario realizó un recorrido por todas las facultades y escuelas de la UNAM, así como en los 14 planteles del bachillerato para confirmar que existen al menos 70 salones o cubículos que son de uso exclusivo de los jóvenes activistas universitarios de distintas tendencias ideológicas, mayoritariamente de izquierda radical.

En Filosofía hay 14 espacios estudiantiles; el “Cachumbambé” data de al menos 15 años y fue originalmente uno de los principales puntos de encuentro de los integrantes del Consejo Estudiantil Universitario (CEU), considerado el ala moderada del movimiento estudiantil.

El Auditorio Che Guevara es el principal de estos espacios. Fue tomado durante la huelga estudiantil de 1999 y en él convergen activistas extrauniversitarios; pese a la petición de los académicos de la Facultad de Filosofía, el entonces rector Juan Ramón de la Fuente nunca intentó recuperarlo.

En la Facultad de Ciencias Políticas hay diez cubículos y/o salones pertenecientes a los estudiantes; se trata de una de las entidades universitarias con los jóvenes más ultras del movimiento estudiantil.

En el Edificio B está el salón de Conciencia y Libertad; el B-001 pertenece al Frente de Lucha Estudiantil Julio Antonio Mella (Flejam); el B-101 a El Brigadista; el B-105 al Colectivo Lucio Cabañas; el B-110 al Colectivo Ernesto Guevara. En el edificio A están dos salones, el 103 y 104, que no tienen identificación de grupo; el A-109 es de el Grupo Rebeldía; el A-211 de Radio Polacas y el A-311 de Alternativa Universitaria.

En los planteles del Colegio de Ciencias y Humanidades destaca que sólo en Naucalpan los jóvenes no tienen espacios. En Azcapotzalco hay tres, uno del Comité estudiantil Metropolitano; otro del Grupo E y el tercero del Manifiesto.

El plantel Vallejo tiene un espacio para la radio estudiantil, otro para el movimiento denominado Regeneración; otro para Coba y uno más para el CEU Histórico; en Oriente están el Cecat; otro para Café Oriente y uno del CGH; en el plantel Sur está el del Cubo del G y el de los Internacionalistas.

En los nueves planteles de la Escuela Nacional Preparatoria existen cubículos o salones para el uso del CEM, el CEU o alguna de las expresiones radicales, pero en todos hay un cubículo especial para quienes se identifican como CGH, como ocurre con el resto de las entidades a nivel licenciatura.

Piden castigo a "asesinos de mexicanos” en Ecuador
Héctor Figueroa Alcántara
Estudiantes de la Facultad de Filosofía de la UNAM, a través del Consejo Técnico de esa escuela, exigieron que se castigue a los responsables de la muerte de los mexicanos que se encontraban en el campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en Ecuador, atacado por el Ejército de Colombia el pasado sábado.

Luego de una asamblea estudiantil, donde también participaron alumnos de Ingeniería, Ciencias Políticas, Ciencias, Economía, así como de los campus Aragón y Acatlán de la UNAM y de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) negaron cualquier vínculo de profesores y alumnos con algún grupo subversivo.

La portavoz de los estudiantes, Frida Espejel, puntualizó que muchos compañeros de la Universidad y del país viajaron a Ecuador, al igual que Lucía Andrea Morett, a participar en una Convención sobre Movimientos Bolivarianos y por eso la presencia de varios mexicanos.

Orale, la cosa esta buenisima, asi que turisteando ¿no?

Agarrense con la nota que viene.....

Niegan en UNAM que estudiantes hayan asistido a congreso en Quito

La secretaria general de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, Tatiana Sule Fernández, manifestó que "no se tiene absolutamente ninguna información de que un grupo haya ido por parte de la Universidad al Congreso Bolivariano", realizado recientemente en Quito, Ecuador.

Nosotros, insistió, no tenemos ninguna información de algún grupo de estudiantes o profesores que hayan solicitado una licencia, que es lo que corresponde, o una comisión para asistir a algún evento fuera del país.

Mencionó que "tampoco tenemos registro de que un grupo de estudiantes nuestros haya pedido algún apoyo de cualquier tipo para asistir a Ecuador".

La funcionaria universitaria fue entrevistada luego de que circularan versiones en el sentido de que el número de víctimas de esta casa de estudio en la incursión que realizó Colombia a
territorio de Ecuador pudiera ser mayor a lo que se pensaba.

Sule Fernández expreso su preocupación por esas versiones, que vinculan a la Facultad de Filosofía, o a sus alumnos, con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Indicó que Lucía Morett ha señalado que no es guerrillera; "en principio nos corresponde darle crédito. Habrá que esperar a que ella misma nos dé su versión".

Además, dejó claro que en la Universidad no se han parado los parientes de ningún alumno o profesor para preguntar sobre ellos, ni siquiera los padres de la lesionada Lucía Andrea Morett o Juan González del Castillo, quien presuntamente falleció.

La funcionaria externó su preocupación sobre el tema y señaló que no hay ningún motivo para asociar a la facultad con ningún grupo de ninguna clase. Simplemente, comentó, aquí se estudian todas las corrientes del pensamiento".

"Es natural en una Facultad de Filosofía y Letras con 13 carreras. No estamos en los tiempos en que por tener un libro de El Capital se te tachara de comulgar con alguna tendencia, porque eso es algo reprobable", indicó.

Por otra parte, estudiantes de la Facultad están reunidos en su interior, en una asamblea en la que fijarán su postura sobre el caso Morett.

Jueves, 6 de marzo de 2008 - 11:30 GMT

Ataque a las FARC: ¿víctimas mexicanas?

Patricia Mercado
Ciudad de México / La secretaría de Relaciones Exteriores de México informó anoche que el personal diplomático colabora con las autoridades de Colombia y Ecuador para confirmar la posible muerte de dos mexicanos en el ataque contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en territorio ecuatoriano.

Los medios en México han especulado con que uno de los fallecidos sea un investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), identificado como Juan González del Castillo.

Santiago Mateos, encargado de prensa de la embajada de México en Ecuador, informó a BBC Mundo que están trabajando junto con el gobierno de ese país para confirmar si había más mexicanos en ese grupo.

"No estamos seguros, el gobierno de Ecuador está verificando que así sea".

La noticia de las muertes se dio a conocer en los periódicos La Jornada y Reforma, aunque el primero informaba sobre un fallecido, mientras que el segundo decía que habían sido dos.

Lo que sí está confirmado es que en el ataque del Ejército colombiano contra las FARC resultó herida la mexicana Lucía Andrea Morett, también estudiante de la UNAM.

Juan y Lucía

En la página de Internet del Auditorio Che Guevara de la Universidad Nacional Autónoma de México se dice que Juan González del Castillo era un militante internacionalista y participó en octubre del 2007 en las Jornadas Político Culturales por los 40 años de la muerte del Che Guevara.

En esa reunión el 8 de octubre pasado, Juan González leyó, a nombre del Núcleo Mexicano de Apoyo a las FARC-EP, una ponencia sobre el conflicto colombiano en la mesa redonda "Che y la insurgencia latinoamericana".

De acuerdo con La Jornada, Del Castillo se encontraba junto a la mexicana herida en el ataque, había viajado a Ecuador el pasado 31 de enero, un día antes del bombardeo, y pertenecía a la cátedra Libertador Simón Bolívar de la UNAM, en la que Morett Álvarez era coordinadora.

A través de una carta dirigida a los medios de comunicación, los padres de Lucía Andrea, de 27 años, aseguran que ella no es guerrillera, y que viajó a Ecuador porque estaba realizando un trabajo de investigación.

"Nos sorprende sobremanera enterarnos del trato que en la mayoría de los medios se da a la información cuando se señala a Lucía Andrea como posible, o incluso, directamente, como guerrillera de las FARC, dadas las implicaciones que esa contundente afirmación conlleva".

Jorge Luis Morett Sánchez, padre de Lucía Andrea, viajará este jueves a Ecuador para estar con su hija, conocer su estado de salud y saber cuándo regresara a México.

Sin embargo, desde Ecuador surgieron versiones de que Lucía Andrea podría ser juzgada en ese país.

La UNAM reacciona

La UNAM envió un comunicado en el que manifiesta su preocupación por la salud de Lucía Andrea Morett Álvarez y por la posibilidad de que algún otro miembro de la comunidad universitaria "haya resultado afectado fatalmente por los sucesos del pasado 1 de marzo".

De acuerdo con la UNAM, Morett Álvarez era estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras, y había terminado su licenciatura en el 2005 y tiene su titulación pendiente.

En el comunicado, la institución expresa "su rechazo al uso de estereotipos que deforman la imagen de los universitarios y de nuestra institución. Estos señalamientos no son nuevos. Preocupa que, una vez más, se intente como hace más de cuatro años, involucrar a esta casa de estudios con grupos ajenos al quehacer universitario".

También informa que se han realizado gestiones ante el gobierno para que se garanticen cabalmente los derechos de la estudiante y su salud.

La veían “muy fresa” y fiestera
Raúl Tortolero
No parecía estarse preparando para ninguna guerrilla cuando aquel martes 18 de septiembre, a las 11 de la noche, llegaba perfumada y desmadrosa, en un automóvil Neón dorado, a la fiesta de unos amigos de trabajo del Imer en la colonia La Candelaria, en la Ciudad de México.

Se trataba del domicilio donde Lucía Andrea Morett se habría de reunir con quienes conoció por haber realizado su servicio social, entre abril y octubre del año pasado, en el Instituto Mexicano de la Radio (Imer).

Su labor de todos los días, en el turno de la tarde, consistía en grabar su voz para cápsulas informativas, tras una investigación hecha por ella misma mediante internet o vía telefónica. Saldrían al aire en el programa noticioso Revista Antena Radio, entre seis y ocho de la noche.

Testimonios recabados entre sus amigos cercanos (quienes optan por el anonimato) no muestran a unajoven hiperpolitizada o con luces de guerrillera.

Para un compañero suyo, Andrea —nadie la llamaba Lucía, e incluso sus participaciones en el radio fueron rubricadas como “Andrea Morett”—, era extraño que hubiera egresado de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), porque se veía muy “fresa”.

Andrea es descrita como alguien superficial, ególatra, que presumía contar con “profundos estudios actorales” y estar relacionada con gente relevante del medio teatral mexicano.

Bajó de su auto —tal vez prestado, porque regularmente se trasladaba en metro, además de que no cobraba un peso en el Imer por el servicio social— cargando un equipo de karaoke completo, ese que sirve para cantar mientras suenan pistas de canciones. Siempre se mostraba sociable, agradable y fiestera. Usaba ropa de marca, como Zara o Astral Freaks. Nunca se le veía fachosa. Le agradaba beber cerveza o vodka Smirnoff, pero esa noche traía vino tinto, Casillero del Diablo. No usaba drogas.

Pronto estaría bailando desde “Me saludas a la tuya”, de Paquita la del barrio, hasta salsa y rolasanglosajonas.

Y saldría bien servida a las cuatro de la madrugada.

No estaba obligada a hacerlo más temprano, porque no tenía hijos que cuidar o una pareja que laesperara.

Se diría que es una escena natural en una persona de 26 años, egresada de la carrera de teatro.

Mas no todo era juerga para Lucía. Leía mucho. Es definida por una compañera como “muy culta”.

Hablaba poco de política, pero si llegaba a hacerlo, criticaba por igual al gobierno federal que a Andrés Manuel López Obrador, y nunca mencionó la necesidad de adoptar un camino armado.

Antes bien, coinciden todas las fuentes, incluyendo a su padre, era pacifista, centrada y defensora de los derechos humanos, especialmente de los indígenas de Chiapas. Nunca dijo que iría con las FARC, que deseara ser guerrillera.

Por supuesto, Jorge Morett, su padre, intenta deslindar a Lucía Andrea de todo lo que pueda afectarla para mal. Entrevistado, se muestra cauto.

“Sé de sus inquietudes sociales, por los procesos de América Latina, sobre el teatro. Ella es actriz, estudió teatro, hizo su servicio social en el Imer y tiene su registro como locutora. En el sistema de noticias”, cuenta el doctor en Agroecología por la Universidad de Córdoba, en España.

Y entonces amplía la descripción de su hija: le parece muy versátil, y dice que ha escrito obras de teatro, aunque no publicadas aún.

Ha sido asistente de dirección y también ha dado clases para niños. Le interesa mucho el teatro latinoamericano. Especialmente el brasileño, afirma.

—¿Y se reconoce a sí misma como zapatista? Lo digo por su aparición ante Marcos en las instalaciones de Ciudad Universitaria, en la UNAM.

—A ella le tocó ser la que leyera un discurso a nombre de losestudiantes.

—¿Su ideología es zapatista, o marxista-leninista o de quécorriente?

Jorge Morett se ríe.

—Es muy ecléctica. Le gusta desde Rosario Castellanos aKafka, o Lovecraft y cuentos de terror. Le encanta también el teatro, como Bertold Brecht, su biblioteca es variada.

—¿Pero se reconoce políticamente como “altermundista”?

—La verdad no sabría decirte cómo se califica.

—¿O maoísta?

—No (ríe). Tiene inquietudes sociales diversas, pero lo que sí puedo decir es que no está en ninguna línea de violencia.

—¿No le gusta la cuestiónarmada?

—No, por supuesto.

—¿Cómo sabe usted que no? ¿Ella se lo dijo?

—No sé si tienes hijos tú. Ella es cariñosísima con sus gatos, amable y se podría decir... me extraña la pregunta, está contra la violencia. Desde chiquita le molesta e indigna la violencia. Es muy sensible a las injusticias.

—¿Milita ella en algún partido político? ¿No es del PRD o algún otro partido?

—No sé si sea de alguno.

—¿Ni usted tampoco?

—Yo hace muchos años me afilié al PRD, no sé si siga siendo miembro de ese partido.

—¿Usted qué tipo de formación social o política le inculcó a ella en su familia?

—El respeto a los derechos humanos primero, el principio a la libertad de expresión, a la libertad de reunión, de manifestación, de pensamiento, la idea de la dignidad, de la honradez, de no lastimar a otros y de ser lo más honesto posible en esta vida y ante los demás. Y de que en esta vida los principios cuentan y que la dignidad es parte de un valor inconmensurable.

—¿Cómo viajóa para Ecuador?

—Salió el día 31 de enero a Ecuador, casi el día 1 de febrero. Seguramente con escala en Panamá o Costa Rica, las normales.

—¿En qué línea aérea se fue?

—No sé en qué línea, pero se fue directamente.

—¿No pasó a otro país primero, a Cuba?

—No, sólo las escalas, dependiendo la línea.

—¿Ella vive con ustedes?

—Vive con su mamá en México, a veces estamos en México.

—¿Con quién viajó? ¿Fue sola?

—Los días últimos antes de irse, el 27, 28 andaba resolviendo varias cosas, pero no sé con quién viajaría.

Fuentes del Ministerio de la Defensa de Colombia afirmaron ayer no contar con el registro de mexicanos militando en las filas de las FARC, ya sea en plena actividad o dentro del programa de “desmovilizados”, bajo el cual tanto las guerrillas como las Autodefensas se reintegran a la sociedad civil.

Por otro lado, Edison Cisneros, vocero del Hospital Militar de Quito, Ecuador, donde se halla en el séptimo piso Lucía Andrea Morett, aseguró que el estado de la mexicana es “estable” y que no corre peligro.

Cisneros no tiene información de cuándo podría ser dada de alta, ya que tuvo una fractura en el tobillo. En cuanto a su situación jurídica, es reportada sólo como “enferma” y no como detenida.

Cinco presuntos miembros de las FARC detenidos en Ecuador
jueves 6 de marzo, 08:26 PM

LAGO AGRIO, Ecuador (AFP) - Cinco presuntos miembros de las FARC fueron arrestados en Ecuador cerca de una base de esa guerrilla que fue atacada por militares colombianos el sábado, dejando 23 muertos y tres heridas, indicó el jueves a la AFP el ministro de Seguridad Interna y Externa, Gustavo Larrea.


Los supuestos guerrilleros fueron capturados en un bohío localizado a cinco km de Angostura, en la provincia amazónica de Sucumbíos, donde se hallaba un campamento de las FARC que fue destruido por un bombardeo de tropas colombianas, señaló Larrea.


Agregó que militares se incautaron de una subametralladora de los presuntos subversivos, quienes fueron trasladados al batallón de selva Tungurahua, acantonado en la población de Santa Cecilia, vecina a Lago Agrio, la capital de Sucumbíos.


Larrea, quien además confirmó que el Ejército encontró otro cadáver en el área bombardeada, dijo que los detenidos estaban descansando cuando fueron localizados por los uniformados, que rastrillan la zona limítrofe luego de la incursión colombiana que derivó en una ruptura de relaciones por parte de Quito.


Con el cuerpo ubicado el jueves aumentó a 23 el saldo de víctimas fatales del bombardeo, incluido el segundo al mando de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas), Raúl Reyes.


Previamente un oficial de la IV División "Amazonas" del Ejército, que tiene bajo su mando la región selvática ecuatoriana, anunció que "se encontró un cadáver más en el sector limítrofe de Angostura".


Según el militar, que pidió la reserva, es probable que se localicen más cuerpos dado que "se emplearon diez bombas de 500 libras y con un radio de acción de 750 metros cada una" durante el bombardeo de Colombia, que a su vez reportó que se llevó el cuerpo de Reyes y de uno de sus lugartenientes, además de uno de sus soldados fallecido.


La acción -en la que se sospecha pudieron morir cinco mexicanos- desató la ruptura de relaciones diplomáticas de Quito con Bogotá, decisión que fue secundada por Venezuela y Nicaragua en solidaridad con el gobierno de Rafael Correa.


Entre las tres heridas ya figura una joven mexicana, quien se recupera en el hospital militar de Quito.


Temprano, el ministro de Defensa de Ecuador, Wellington Sandoval, señaló que durante el ataque se utilizaron cinco "Smart Bombs" (bombas inteligentes), de las mismas que emplea Estados Unidos.


"Es una bomba que pega dentro de un metro de distancia de lo que está programado, en aviones a gran velocidad", indicó el funcionario, y señaló que para poder ubicar a Reyes se "necesitaron equipos que no tienen las Fuerzas Armadas latinoamericanas".


Este jueves las Fuerzas Militares de Ecuador, que reforzaron su presencia en la frontera por orden de Correa, realizaron un sobrevuelo en el que también detectaron el desplazamiento de colombianos hacia el lado ecuatoriano.


La AFP contactó a la Oficina de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) que "se abstuvo de confirmar la versión hasta tanto reciban el informe de sus delegados en la zona".


La OEA aprobó una resolución en la que se "juzgó como una violación a la soberanía ecuatoriana" el operativo colombiano en Ecuador.

Lo que se dijo de las FARC en México y fue negado
Redacción EL UNIVERSAL.com.mx
El Universal
Ciudad de México
Miércoles 05 de marzo de 2008


Durante una conferencia de prensa, el embajador colombiano Luis Ignacio Guzmán, mostró en 2003 fotografías que presuntamente demostraban las actividades que simpatizantes del grupo mantenían en la máxima casa de estudios


La presencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en México se remonta a casi cinco años. A las FARC incluso se les ha detectado dos lugares físicos en donde sus allegados han mantenido actividades, uno de ellos en Ciudad Universitaria y el otro en un departamento de Diagonal de San Antonio en el DF.

EL UNIVERSAL publicó en junio de 2003 una información relacionada con el conflicto diplomático que generó el embajador de Colombia en México, Luis Ignacio Guzmán, cuando acusó que las FARC operaban desde la Universidad Nacional Autónoma de México.


En conferencia de prensa, el diplomático señaló que la guerrilla había abierto una oficina en la Facultad de Filosofía y Letras y mostró fotografías que presuntamente demostraban las actividades que simpatizantes del grupo mantenían en la máxima casa de estudios. Empero, la Universidad rechazó, el 11 de junio, “tajante y terminantemente” las palabras de Guzmán y las consideró “graves, superficiales, aventuradas e irresponsables”.


Esta declaración obligó a un comunicado posterior de ambos gobiernos diciendo que carecían de pruebas y finalmente, en 2004, en el retiro del embajador Guzmán.

Por su parte, la Procuraduría General de la República (PGR) informó que no tenía indicios, denuncia o investigación alguna sobre el caso. México y Colombia lamentaron “los inconvenientes que estas informaciones hayan podido causar a esa respetable institución universitaria”.

Luis Guzmán, jefe de la misión diplomática de Colombia en México, había protestado por la presencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en la Universidad Nacional Autónoma de México, lo cual mereció un enérgico rechazo por parte de la máxima casa de estudios.

Se defienden los estudiantes

En un recorrido realizado durante ese mismo mes, los integrantes de grupos como el Núcleo de Apoyo a las FARC, que se concentran en la Facultad de Filosofía, y del Frente de Lucha Estudiantil Julio Antonio Mella (FLE-JAM), en Ciencias Políticas y Sociales, aseguraban, en entrevista con EL UNIVERSAL, que su trabajo es meramente de información, de intercambio de ideas y de debate para conocer la realidad en países como Colombia.


En esa dependencia universitaria –como en otras– se han formado los llamados “cubos” o “colectivos”, integrados por exmiembros de lo que fue el Consejo General de Huelga (CGH), señaló René González, consejero universitario de la Facultad de Filosofía y Letras y miembro del colectivo Coordinadora Estudiantil. Ahora, decenas de éstos ocupan cubículos en instalaciones universitarias y defienden corrientes o “causas sociales”.

Un ejemplo de ello, el referido Núcleo de Apoyo a las FARC, el Frente de Lucha Estudiantil Julio Antonio Mella, cuyos cubículos fueron señalados por el embajador colombiano en México, Luis Ignacio Guzmán, como sitios donde presuntamente realizan actividades miembros de la guerrilla colombiana, lo cual fue rechazado por integrantes de esos grupos y por la propia Rectoría de la Universidad.

Miembros del FLE-JAM, que pidieron el anonimato, reconocieron durante un recorrido que se hizo por diferentes facultades que sí difunden propaganda o folletos relacionados con el conflicto en Colombia.

Las FARC en México

En otro recorrido por el inmueble donde ocuparon un departamento por diez años los voceros de las FARC en Diagonal San Antonio 927, habitantes del lugar señalaron que fueron siempre vecinos tranquilos.

No se metían con nadie pero recibían frecuentes visitas de muchachos y de otras personas, dice Adrián, uno de los conserjes del lugar que los sudamericanos abandonaron en mayo de 2002 por disposición del gobierno mexicano.

Presencia en 2004

A principios del 2004, el gobierno de Colombia pidió una vez más a México reconocer a las FARC como una organización terrorista, además de que denunció que es más fácil que un miembro de ese grupo obtenga una visa mexicana que un empresario o un estudiante.

El embajador de Colombia en México, Luis Ignacio Guzmán Ramírez, reiteró la denuncia de que en territorio mexicano operan miembros de las FARC, por lo que hizo un llamado a la administración del presidente Vicente Fox, para cerrar las fronteras a estas personas.

A mediados de febrero, México pidió a Colombia retirar a su embajador en nuestro país, Luis Ignacio Guzmán Ramírez, por sus constantes declaraciones sobre la presencia de miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el país.

En aquél momento, Guzmán Ramírez dijo a EL UNIVERSAL que en Colombia es más fácil que un miembro de las FARC obtenga una visa para México, que un empresario o estudiante.


Ante ello, el canciller Ernesto Derbez habló por teléfono con su homóloga Carolina Barco para expresar el malestar de México.

Finalmente, el embajador de Colombia en México, Luis Ignacio Guzmán Ramírez, dejó su cargo el 1 de marzo.

Cabe recordar que el 13 de abril del 2002 el presidente Andrés Pastrana, dijo, desde su país, que su homólogo mexicano Vicente Fox se comprometió a cerrar una oficina de la guerrilla izquierdista FARC, en el país azteca.

“Hoy tuve oportunidad de hablar con el presidente Fox. Ya comenzó a implementarse el cierre de la oficina de México que tenían las FARC”, indicó Pastrana, según información difundida por diversas agencias de información.

Lucía Morett, presunta guerrillera.

Esta mexicana resultó herida tras el ataque del Ejército colombiano a un campamento de las FARC en Ecuador. Sus padres dicen que iba de vacaciones, los ecuatorianos no piensen lo mismo.

Guadalajara.- Turismo, para algunos, es relajación en una hamaca en un hotel de playa. Otros buscan algo de aventura al escalar una montaña o bucear con tiburones. Para Lucía Andrea Morett Álvarez, turismo es viajar a lo más impenetrable de la selva amazónica; convivir con el segundo de una guerrilla; despertar en la noche con el ruido de aviones, helicópteros y bombazos. Recibir un balazo en un glúteo.

Al menos eso es lo que dice el padre de la mexicana que resultó herida por el Ejército colombiano en Ecuador: “Ella iba a un congreso, iba a hacer actividades de turismo”.

Hasta el sábado pasado, la mexicana Lucía Morett se encontraba en un campamento en la localidad de Santa Rosa, en plena selva amazónica y a pocos kilómetros de Colombia, pero en territorio ecuatoriano. Una llamada del segundo de las Fuerzas Armadas revolucionarias de Colombia (FARC), Raúl Reyes, y un satélite hicieron que las “vacaciones” de Lucía se truncaran. Y no fue porque su equipaje no llegó, o tuviera problemas con migración, ni mucho menos porque perdió su pasaporte (cosa que sí sucedió: quedó entre esquirlas y cuerpos descuartizados), sino porque el Ejército colombiano decidió bombardear la zona.

Entonces inició un conflicto entre las dos naciones, más la incursión de un tercer país: Venezuela. Y en medio de todo una mexicana de 26 años que estaba de turista, aunque el ejército colombiano y ecuatoriano no piensen lo mismo. “No es guerrillera, sino sólo una estudiante de literatura dramática y teatro con inquietudes sociales”, comentó Jorge Morett Sánchez, maestro en la Universidad Autónoma de Chapingo y padre de la presunta guerrillera. Lucía fue estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México, donde destacó en su aprovechamiento, con un promedio superior a nueve.

La simpatía por guerrillas y movimientos populares para Lucía no son cosa nueva. En 1998, siendo estudiante de bachillerato y menor de edad, fue detenida por integrantes del Estado Mayor Presidencial por “faltarle al respeto” al entonces presidente Ernesto Zedillo en un acto en la UNAM de Texcoco. Lucía protestaba contra el mandatario por no cumplir los acuerdos de San Andrés Larrainzar, mientras mostraba un activismo a favor del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Después de su detención, fue trasladada a las instalaciones de la Policía Judicial del Estado de México. Un juez la dejó en libertad, no sin antes haber sido interrogada y fotografiado por el Estado Mayor Presidencial, según consta en un expediente de Derechos Humanos Agustín Pro. También junto con su hermana, Sonia, se manifestaron por la liberación de los hermanos Cerezo Contreras, presuntos guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias del Pueblo (FARP).

Lucía convalece en un hospital militar de Quito, donde fue intervenida quirúrgicamente por un impacto de bala y la extracción de múltiples esquirlas que tenía en su cuerpo. Un médico del Hospital Militar de Ecuador comentó que la mexicana se salvó “debido a que estaba castigada y que no estaba directamente en la zona principal del campamento bombardeado”. Lucía está estable. Ya no tiene pasaporte, pero la Cancillería mexicana “le brindará protección consular”, para su posible retorno a México. Ecuador tiene otros planes: Será juzgada por sus tribunales.

Sí había más mexicanos con FARC: Morett
AP
QUITO.- La mexicana que resultó herida en el ataque colombiano a una célula de las FARC en territorio ecuatoriano, en el que murieron 25 personas, dijo a las autoridades ecuatorianas que habían más mexicanos en el grupo, según informó el ministro de Seguridad, Gustavo Larrea.


“Lo confirmado hasta el momento es que una ciudadana mexicana se encuentra herida en el hospital militar y que existe información de parte de ella de que en el grupo habían más ciudadanos mexicanos'', expresó Larrea en una rueda de prensa el jueves en la noche.


No precisó el número revelado por Lucía Morett Alvarez, que se recupera en el hospital Militar de Quito, pero dijo que “existe el reclamo de cinco familias mexicanas que piden se investigue si cinco de los fallecidos eventualmente pueden ser mexicanos''.


“Hemos solicitado copias de las huellas dactilares para determinar si estos ciudadanos murieron en la masacre sucedida el 1 de marzo'', dijo, en referencia al operativo militar colombiano en el que atacaron a un campamento de las FARC ubicado en Ecuador.


En la acción resultaron heridas tres mujeres, dos colombianas y una mexicana, y murieron 25 guerrilleros, incluido Raúl Reyes, número dos de la organización rebelde y otro de sus compañeros, que fueron llevados a Colombia por militares de su país.

Vaya, vaya...CONSIDERANDO QUE: las FARC tienen contacto con los mafiosos mexicanos (Vanguardia, sept. 2007), yo me pregunto: en qué se benefician los estudiantes mexicanos de la UNAM, al "estudiar" el modus operandi y el modus vivendi de las guerrillas latinoamericanas; la FARC muy en especial? Los pobres estudiantes de filosofía y letras obviamente no tienen la culpa -concediéndoles el beneficio de la duda- ya que simplemente están respondiendo a lo que les enseñan, a su medio ambiente (plagado de injusticias), con el entusiasmo e idealismo juvenil. Hace tiempo mencioné, el que para mí es un RETO PERSONAL, Carlos Montaner dijo: "Porqué en latinoamérica NO hemos producido NINGÚN pensamiento ORIGINAL? (si se fijan reciclamos toooodo lo europeo, principalmente las ideas políticas), y mi respuesta sería: Porque tenemos algún oscuro contrato que dice: Al jodido hazlo más jodido (no importa si se trata de un estudiante, trabajador, académico...el caso es que sea jodido), creen acaso que a los estudiantes del TECNOLOGICO DE MONTERREY los invitan a dar esos "tours estudiantiles"?, ah, verdad????
Adiós,

Ana Harm.

Diputado mexicano asegura que extradición de Morett fue ordenada por un juez “comprado”
17:51 :: martes, 06 de enero de 2009

Este martes, tras el anuncio de la Fiscalía General del ecuador de haber iniciado el proceso pertinente para la extradición de la mexicana Lucía Morett, un grupo de legisladores de la izquierda de ese país anunciaron su deseo de reunirse con el presidente Rafael Correa.

El objetivo de los congresistas es evitar la extradición de la ciudadana, capturada por el ejercito ecuatoriano, tras sobrevivir al ataque colombiano a la base de las FARC en Angostura que concluyó con la muerte de alias “Raúl Reyes”, número uno de la guerrilla y de otros 24 insurgentes más.

El Fiscal general Washington Pesántez, anunció este lunes el inicio del proceso de extradición de Morett y de las colombianas Doris Bohórquez y Martha Pérez, únicas sobrevivientes del ataque del 1 de marzo, que terminó con la ruptura de las relaciones diplomáticas entre Quito y Bogotá.

El diputado mexicano Cuauhtémoc Sandoval (PRD), que lidera la defensa de Morett en su país, descalificó el proceso y aseguró la existencia de corrupción en la solicitud de extradición. La formulación la hizo un juez ecuatoriano "comprado" por el Gobierno colombiano, dijo el legislador. Las mujeres son acusadas del delito de atentado contra la seguridad interna del Estado.

Sin embargo, Sandoval, dijo no descartar la posibilidad de que Morett venga al Ecuador para declarar "como testigo" y no como acusada, pero acompañada de su partido.

"Espero que la Fiscalía de ese país no insista y en caso de ser necesario nosotros (los legisladores de su partido) iríamos a hablar con el presidente Rafael Correa", acotó Sandoval.

Morett, Bohórquez y Pérez, salieron amparadas por el gobierno de Daniel Ortega, en Nicaragua, para evitar una posible acción de los gobiernos de Colombia y Ecuador.